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Es bien sabido que la NBA es fría, gélida en algunos momentos y si hay una etapa donde se puede trasformar en el mismísimo Yeti es en el Deadline, donde las franquicias juegan a cambiarse figuritas y a negociar como si los jugadores pasasen a ser entes dispuestos a aceptar su destino sin más. Denver finalmente no se metió en el mercado y a ciencia cierta no se sabe que tanto hizo el GM por conseguir traspasos, sobre todo en aquellos que involucraban a Facundo.

Según contó TeamFacu, la cuenta que maneja la info de Campazzo de manera oficial, el propio jugador por momentos le comentó a un cercano “No sé si estoy yendo al pedo (sic) al aeropuerto. Capaz ni viajo a Boston”. En ese trayecto hasta el aeropuerto, cuando los minutos se hacían un cuello de botellas para destrabar todas las transacciones, los rumores estaban por todos lados y Facu pasaba eso instantes revisando las redes una y otra vez.

Finalmente no hubo movimientos pero su agente, recién a las 16:50 le avisó que seguía en Colorado con un escueto “Te quedas”. Nada ni de un puñito, ‘vamos’, ‘que bueno’, ‘a seguir remando’, simplemente un continuas y con ello Facu se puso en modo hay que aprovechar lo que venga, y así lo hizo. Dos convincentes actuaciones en Boston y Toronto para mandar un mensaje de “acá estoy, cuando me necesiten estoy firme”.

El golpe de Monte Morris en la cabeza le dio la chance de volver a la rotación por detrás de Bones Hyland, quien también salió fortalecido de la situación de ser titular, dado que Malone no hizo más que felicitarlo por su trabajo y quizás con poco tacto en el duelo contra Boston expresó que tenía que haber cerrado con él y no con Facu como lo hizo. Como se dice en el barrio, un amigo.

Momentos de tensión interna un día, minutos de calidad al otro día, la NBA en estado puro en la cabeza de Facundo, que a juzgar por lo que declara está tranquila y concentrada en recuperar terreno como sea.