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Gilbert Arenas era de esos jugadores súper talentosos, con una gran calidad y un midrange de los viejos tiempos. Venía con una carrera muy interesante hasta que se le ocurrió entrar con varias armas al vestuario de los Wizards, amenazarse con un compañero y pasar a ser recordado más por ese incidente que por otra cosa.

No obstante con el paso del tiempo se ha convertido en un analista filoso del baloncesto y ferviente defensor de la nueva escuela, como así también devoto de LeBron James y todo su legado, ponderando muchas veces lo que hizo el Rey por el juego, por delante de lo que dio Michael Jordan.

Su juego perimetral siempre estuvo entre aquellos jugadores realmente veloces, que podían combinar destreza y eficacia y si se habla de ese estilo de jugador, con un gran uno contra uno, Jamal Crawford, es uno de los mejores sin dudas. Pero acá, el bueno de Gilbert se puso a comparar a los mejores sextos hombres de los últimos tiempos o de la historia, como lo son el ex Clippers y Manu Ginóbili, quien para nada tenía un flojo uno contra uno, más bien todo lo contrario. Sin embargo, Arenas optó por darle todo el crédito de lo hecho por Manu al contexto Spurs y terminó sacando al argentino de la pelea por el mejor sexto hombre de todos los tiempos según su visión.

"Es difícil convencerme de que Ginóbili es individualmente mejor que Jamal Crawford. Miraremos sus currículums y diremos 'Ginóbili tiene 4 anillos'. ¿A quién vas a tomar 1 contra 1? 'Voy a tomar a Jamal', puesto que estamos hablando de mejor jugador ¿no? Así es como lo evalúo. Manu estuvo increíble en esa estructura, pero cuando hablamos de juego individual, no está entre los 5 mejores sextos hombres de todos los tiempos", expresó con convicción Arenas.

Sobre el gustos no hay nada escrito, pero la opinión de Arenas es una manera de pensar de los fanáticos del básquet de Estados Unidos, quienes prefieren un jugador encandilando con la pelota en la mano, a uno que hace todo bien por y para el equipo; y que cuando se lo proponía daba highlights increíbles. Puede parecerte mejor jugador Jamal, pero negar a Ginóbili entre los mejores cinco sexto hombre de la historia, es mínimo una afirmación polémica.