NBA

El millonario pedido de Manute Bol a Tim Hardaway cuando éste llegó a Golden State

16:31 27/06/2022 | El base llegó a los Warriors como una de las figuras jóvenes para levantar a la franquicia y tenía intenciones de continuar con su número de la suerte, pero no pudo.

Tim Hardaway y Manute Bol en la única temporada juntos en los Warriors (Foto: Getty)

Los números para algunos jugadores son tan importantes por diversos motivos y a su vez para el público en general es una manera de identificarlo. Si uno habla de Tim Hardaway está hablando de aquel jugador que jugaba con el número 10 en los Golden State Warriors, en aquel equipo veloz de principios de los noventa en el que componía un divertido trío con Chris Mullin y Mitch Richmond.

En el Draft de 1989, los Warriors utilizaron su pick número 14 para llevarse al base que venía con credenciales desde la universidad de Texas-El Paso y confiaba en mejorar su perímetro con su potencial. Al mismo tiempo, en el equipo de San Francisco, una ciudad cosmopolita por excelencia de Estados Unidos, en el juego interior estaba el excéntrico Manute Bol, aquel pivote sudanés de 2,31 que irrumpió en la NBA como una figura fuera de lo común más por su envergadura que por su juego.

En el afán de poder continuar con el número que venía atravesando su vida y era el de la suerte, Tim como novato con cierto nombre, se acercó a Manute para preguntarle si estaba la posibilidad de que le cediera el número 10. “El 10 fue mi número desde la secundaria, fue la primera que tuve y se quedó conmigo toda mi carrera. Pero bueno, el primer año en la NBA no pude y fue una historia divertida. Un día me acerqué a Manute y le dije ‘oye Manute, ¿cuánto me costaría obtener el número 10? Y me respondió ‘500 mil dólares’. ‘Vamos hombre ese es todo mi contrato’ le dije y me contraatacó con ‘Exactamente, es me demostrará que si realmente lo quieres debes darme tu contrato’. Le dije gracias, el cinco también me parece un lindo número (risas)”, recordó en Opostories from the NBA.

Tim Hardaway solo estuvo ese primer año jugando con otro dorsal que no sea el diez y ni bien Manute fue canjeado a Philadelphia, el base se hizo de su camiseta y nunca más soltó su número de la suerte e hizo de él una marca registrada, aquella que lo llevó, por ejemplo, a ser desde el 2022 un miembro del Salón de la Fama, una condición que lo define como jugador y su dorsal será el recuerdo de la memoria colectiva de los fans para con él.

Compartir