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EL ANALISIS DE ARGENTINA

EL TRAYECTO RUMBO A NANTES

LA GUIA CON TODOS LOS EQUIPOS

Argentina 38 - Turquía 66

Argentina sufrió el poderío europeo en la segunda jornada del Repechaje Olímpico y cayó ante Turquía por un claro 66-38. Las Gigantes cerraron la fase inicial, mañana tendrán jornada libre en el cierre del Grupo B y quedarán expectantes ante el potencial cruce de cuartos de final con rival a definir (que saldrá del A, donde Francia tiene grandes chances de ser el contrincante el próximo viernes). Argentina está virtualmente en cuartos, solo una épica victoria de Camerún ante las turcas complicaría sus chances de continuar en el torneo.

El seleccionado nacional no tuvo una jornada lúcida, no tuvo efectividad desde el inicio y ese fue un problema que lo acosó durante todo el encuentro. Eso lo condenó junto con algunas desconcentraciones defensivas, ante un rival top del nivel europeo que sacó diferencias en centímetros, técnica y firmeza física, brillando con la figura del duelo Lara Sanders (18 puntos y 15 rebotes).

Argentina arrancó imprecisa, tomando buenas opciones, circulando el balón pero incomodada por un rival más duro físicamente. A pesar de sus intenciones lanzó trabando mucho, obligada por unas turcas que atrás estuvieron compactas y adelante sacaron diferencias con Sanders en la pintura.

El panorama se le complicó a Argentina porque ante la falta de puntos también sufrió en el aro propio, por momentos entró en lagunas de ansiedad pero siempre trató de volver a su órbita. De todas formas no alcanzó, lo de Sanders fue dominante (12 puntos en el primer cuarto) y a pesar de que Santander trató de buscar variantes la diferencia en el primer cuarto fue muy clara: 18-4 y un rival que tuvo todo bajo control.

Argentina siguió moviendo el banco y encontró algunas acciones positivas con Fiorotto, Burani, Pavón o Rosset. De todas formas, el peso de las turcas se hizo sentir en el juego interior, primero con Sanders pero después con la veterana Yilmaz. A eso se sumaron varias acciones positivas de Vardali, complicando desde afuera.

Y la productividad de las lungas europeas fue un problema que prácticamente no tuvo solución. Argentina logró algunas buenas defensas y obligó pérdidas, sobre todo en el ocaso del parcial, pero aunque descontó un poco la brecha el dueño del partido siempre fue el seleccionado turco (33-17). El segundo periodo estuvo un poquito más controlado por Argentina, y aunque de todas formas la brecha fue muy difícil de disminuir la mejoría en el cierre del parcial se tomó como positiva.

En el tercer capítulo la historia no cambió demasiado, Argentina siguió mostrándose poca efectiva y eso ante unas turcas mucho más efectivas y compactas en la zona pintada la diferencia se volvió prácticamente irremontable. Independientemente de la falta de talla que se puede acusar (más de siete centímetros entre las pivotes de ambos costados, con Sanders como bandera), lo cierto es que la inefectividad de Argentina (10/42 en cancha) hizo todo más complicado.

Por eso la diferencia no tardó en estirarse, de hecho las turcas aprovecharon un gran cierre en el tercer parcial para sacar 32 unidades de distancia (53-21). La carrera de 11 a 0 siguió abriéndose en el comienzo del último periodo, con méritos para las europeas pero también con unas chicas argentinas que bajaron la intensidad y concentración en defensa, facilitando el trabajo turco.

Todo ese último capítulo estuvo prácticamente de relleno, Argentina encontró un par de tiros acertados tanto de tres (con Rosset o Thomas) como en algunas pocas ocasiones en las que terminó corriendo, sin embargo eso solo sirvió para maquillar un poco la diferencia.

La historia terminó cerrándose por 66-38, con las Gigantes soltándose un poco más en el ocaso del juego pero con un golpe que dejará cosas a corregir pensando en lo que viene. Mañana cerrarán el grupo Camerún y Turquía, donde si las europeas ganan (en los papeles son claramente favoritas) se quedarán con el grupo.