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San Antonio volvió a sacar a relucir su mejor básquet y este viernes pasó por encima a Los Angeles Clippers. Con la llave mudada al AT&T Center de Texas, los Spurs se quedaron con una magnífica victoria por 100-73, pusieron la serie 2-1 a su favor y este próximo domingo estarán jugando el cuarto punto. Kawhi Leonard volvió a tener una labor excelente, fue la piedra angular de la arrasadora victoria de San Antonio al convertir 32 puntos y brilló cuando más se lo necesitaba. Manu Ginóbili, con una labor que fue de menor a mayor, sumó 2 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias.

El conjunto texano tuvo un comienzo de altísimo nivel. A pesar de las dudas que se tejieron en la previa en cuanto a su presencia y tras su dolencia en el tobillo, Parker arrancó el partido como titular y ayudó para que San Antonio tenga un inicio a toda marcha. Leonard y Green estuvieron acertados, y de la mano de una gran efectividad el dueño de casa tomó la primera ventaja del partido y se escapó a 11-2. Los Clippers intentaron revertir un pobre arranque, encontraron algunos puntos en Redick pero no alcanzó para intimidar a unos Spurs mucho más sólidos, que contaron con un eficaz Leonard y que pasaron a ganar 25-13 de la mano del último MVP de las Finales.

Ante la poca reacción y el bajo goleo de su equipo, asediado por la gran oposición de San Antonio, Doc Rivers optó por meter un profundo cambio de fichas sacando a los titulares y enviando a la cancha a los habituales suplentes, con la intención de ver si la historia podía cambiar. De todas formas, a pesar de que la brecha se recortó levemente, los Spurs fueron dominantes y se llevaron el primer capítulo por 25-16.

Los Clippers encontraron algo más de efectividad en el siguiente episodio. River encajó un triple en el arranque del parcial pero Bonner y Mills respondieron mediante la misma vía, la diferencia pasó a ser una vez más de doble dígito (31-19) pero los Spurs se secaron tras estos bombazos y permitieron que los angelinos se arrimen. Un triple de Paul animó a la remontada de los Clippers, que siguieron ajustando la brecha con Jordan y Griffin hasta ponerse a solo cuatro tantos (35-31).

Pero el momento irregular de San Antonio se dispersó con una nueva aparición de Leonard. El alero gozó de un tramo ultra positivo, se combinó junto con algunas acciones de Green (con quien realizó un tremendo alley oop) y los Spurs se distanciaron a 46-33. La defensa texana fue vital en este periodo, porque San Antonio le provocó muchas pérdidas a los Clippers y supo capitalizarlas con puntos a su favor. De todas formas, la visita tuvo una pequeña recuperación en el final del parcial gracias a un Griffin mejorado, hasta ese momento casi desaparecido del juego pero unos últimos tres minutos mucho más activos. Con el tanteador de 46-38 a favor del dueño de casa, San Antonio arribó con una leve pero buena ventaja a los vestuarios.

En el tercer periodo comenzó a gestarse el quiebre. San Antonio arrancó con una gran embestida encabezada por Leonard, que hasta ese momento llevaba 16 puntos pero durante todo el tercer capítulo estiró sus dígitos personales a 29 unidades. El alero se cargó el equipo al hombro en ofensiva, mientras que en defensa los Spurs volvieron a edificar una muralla y anularon cualquier chance de anotación para los Clippers.

Trece de los veinticuatro puntos anotados por San Antonio quedaron en las manos de Leonard, que brilló y terminó de disparar el partido. En apenas unos instantes la brecha pasó a ser de dieciséis (59-43), y a pesar de que Leonard fue reemplazado restando poco menos de cuatro minutos para el cierre, la defensa de San Antonio siguió haciéndose presente para terminar de secar a los angelinos y sacar una diferencia mayor a veinte puntos: 70-49 al culminar el capítulo. Unos Clippers desconocidos, sin Griffin ni Paul en sus mejor noche, terminaron padeciendo el amplio dominio texano.

La reacción ya era demasiado complicada, pero los Spurs continuaron con su embestida y quisieron tomarse revancha de la dura caída en el Juego 1. Por eso el último parcial arrancó con dos bombazos firmados por Mills y Green, San Antonio se distanció a un mucho más cómodo 78-51, siguió atacando con mayor intensidad y llegó a sacar una máxima de treinta y siete unidades (92-55). Belinelli, mucho más suelto al igual que todo San Antonio, fue uno de los grandes partícipes de ese tramo dilapidario.

Los Clippers nunca tuvieron reacción. Desaparecidos por completo durante la segunda mitad (el complemento fue dominio texano por 54-35), los angelinos no pudieron volver al partido y el último cuarto estuvo de más. San Antonio se encaminó a un cómodo y arrollador triunfo por 100-73. Ahora, con la serie 2-1 a su favor, el equipo de Gregg Popovich buscará arrimarse a la clasificación el próximo domingo, jornada donde se jugará el cuarto punto de la serie.

Manu Ginóbili (San Antonio Spurs): suplente, 2 puntos (1/2 en dobles), 6 rebotes, 6 asistencias, 2 pérdidas, 2 tapas y 2 faltas personales en 16m59s.