NBA 2017/18

San Antonio metió la tercera: 117-101 a Minnesota y 5º puesto

23:48 17/03/2018 | Vencieron a Minnesota con claridad 117-101 y escalaron hasta el quinto puesto del Oeste. Manu terminó con 10 puntos y fue clave su primer entrada.

Intentando descifrar antes del partido lo que pasa con San Antonio y, parafraseando a Mario Vargas Llosa en su inolvidable inicio de Conversación en la Catedral, nos preguntamos: ¿cuándo se jodieron los Spurs? El grueso le tira la culpa a la lesión de Leonard, o a las lesiones en general, y es un gran factor: hasta este partido, los Spurs se habían perdido 184 juegos por lesiones, con Kawhi a la cabeza (60). Y Pop, usado 24 formaciones iniciales distintas. 

¿Qué ocurrió para que los Spurs pasaran del récord de 34-19 del 30 de enero al 37-30 del 12 de marzo? Si el problema fueran las lesiones, ¿por qué se mantuvo durante 53 partidos una marca más que aceptable (64.2% de triunfos) y luego todo se vino abajo? No hay una razón que todos acepten, más allá de la argumentación general de una debacle anímica importante. La incertidubre con Leonard no ayudó y la falta de confianza hizo estragos, sobre todo porque quedó un plantel con muchos inexpertos tomando decisiones (Murray, Anderson, Bertans, Forbes). Letal. 

Las dos victorias previas ante Orlando y New Orleans, en la seguidilla de seis partidos que los Spurs tendrán de local, iluminaban un camino mejor, coronado con este triunfo, el tercero en fila, por 117-101 ante Minnesota. LaMarcus Aldridge fue la figura con 39 puntos. Ginóbili sumó 10, 3 rebotes y 3 asistencias en 16 minutos. 

Los Wolves eran un rival directo en la lucha por entrar a los playoffs, por ende victoria clave. Pero Minnesota empezó mucho mejor, desequilibrando con Teague, KAT y Wiggins, hasta que Pop mandó a los viejitos a la cancha: Manu, Parker y Gasol. El 19-11 en contra se convirtió en 29-26 a favor, con producción rápida del argentino en puntos, rebotes, asistencias y robos. Y energía, claro. El contagio fue evidente y el que tomó la posta fue Aldridge, una pesadilla en el 2C para los Wolves, anotando 12 seguidos, sumando 22 y poniendo a los Spurs 13 arriba. 

Si en el tercer período San Antonio volvió a complicarse, fue porque la sensación es que cuando están juntos Murray y Anderson, los Spurs se convierten en demasiado previsibles que en cuanto a las vías de gol ante la falta de tiro externo. Por eso, cuando Pop volvió a desarmar ese dúo, las cosas volvieron a funcionar con relativa tranquilidad. Manu tuvo un segundo ingreso excelente y los Spurs recuperaron los 12 de ventaja. Cuando se vino la noche (Minnesota a 6), otra vez lo mismo: afuera Murray, adentro Parker. Y 17, la máxima, a favor (112-95). 

Ganó claramente San Antonio 117-101 con Aldridge como figura estelar (39 puntos) y Ginóbili en alto nivel nuevamente, como el jueves ante los Pelicans: 10 puntos, 4/5 dobles, 0/1 triples, 2/2 libres, 3 rebotes, 3 asistencias y 2 recuperos en 16 minutos. Ahora quedaron 40-30, igual que su rival de hoy, pero superándolo en el desempate y escalando al quinto puesto del Oeste. El lunes irá por la cuarta victoria seguida (igualaría su mejor racha de la temporada), ante unos Warriors machucados, sin Curry, Thompson ni Durant. 
 

Fabián García / [email protected]
Enviado especial a San Antonio, Estados Unidos
En Twitter: @basquetplus 

 

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