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Estos playoffs podrían ser tranquilamente la última vez que vamos la famosa táctica de las faltas intencionales, implementadas para detener a Shaquille O´Neal con el Hack-A-Shaq y hoy en día utilizadas con otros malos tiradores de libres como Dwight Howard o DeAndre Jordan. 

Aunque sigue siendo uno de sus defensores más importantes, Gregg Popovich ya hace tiempo que no está sólo en esta estrategia y varios otros entrenadores la han usado en el pasado reciente. Obviamente, si bien en algunos casos puede ayudar a los conjuntos que la llevan a cabo, la táctica es perjudicial para el fanático imparcial y la venta del producto, algo que el Comisionado Adam Silver no deja pasar de largo.

"Tenemos previsto revisar la situación. Hoy me encuentro indeciso al respecto. Mi idea original es que debemos cambiar la regla, aunque luego de hablar con algunos General Manager me hicieron entender que los jugadores deberían ser capaces de encestar los libres. Eso ha cambiado mi punto de vista", dijo el Comisionado durante una entrevista con ESPN.

"Igualmente, cuando sucede en partidos que veo por televisión, honestamente lo siento como algo perjudicial para el entretenimento de nuestros fans y eso también es importante. Vamos a discutir sobre este tema con los dueños, General Managers y el Comité de Competición, durante los próximos meses".

Está claro que hoy ambos lados tiene parte de razón. Desde lo comercial, Silver está en lo cierto que no beneficia a nadie. Pero mientras las reglas lo permitan, los técnicos están en todo su derecho a seguir utilizando la estrategia, mientras crean que puede ayudarlos a ganar partidos.

La pregunta que surge pasa por cómo eliminar el fouleado intencional. En los cierres de los partidos, cualquier falta fuera de la pelota es cobrada con un tiro libre más la reposición, evitando así este escenario. Sin embargo, esto parece imposible de realizar durante los 48 minutos, no sólo porque se estaría castigando exageradamente a cualquier contacto normal alejado del balón, sino porque además se lanzarían demasiados libres como parte de la sanción, volviendo el problema a cero. Igualmente, para eso la NBA tiene especialistas y veremos que deciden durante la pretemporada.