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La Liga 2016/17

Sin Delfino pero con la ilusión viva, Boca venció 114-103 a Atenas

23:06 25/04/2017 | La esperanza por salvarse sigue latente para Boca, que esta noche derrotó a Atenas y sigue de cerca a Hispano. Funes la rompió con 32 puntos.

Enorme noche de Funes, el gran héroe de Boca ante Atenas (foto: La Liga Contenidos)

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Boca 114 - Atenas 103
 
La situación de Boca viene siendo comprometida desde hace tiempo, en el fondo de la tabla y obligado a salir de esa última posición para evitar jugar la permanencia. En ese orden hace unas fechas que corre atrás de Hispano, en una lucha casi mano a mano donde ninguno quiere dar el brazo a torcer y cada paso resulta fundamental. Dentro de estos pasos, el triunfazo de esta noche por 114-103 ante Atenas representa una nueva bocanada de oxígeno para un Boca que se aferra con uñas y dientes.
 
Boca volvió a ponerse cerca de Hispano Americano y le transmitió un poco más de presión al equipo austral. Hoy lo ganó sin la presencia de su estrella Carlos Delfino, pero con la tranquilidad de que apareció un descomunal Fernando Funes (32 puntos con 7/12 en triples) para guiar al Xeneize. Además de lo hecho por el cordobés, los trabajos de Lucas Gargallo y Fotios Lampropoulos también resultaron decisivos.
 
Desde el arranque sorprendió la interesante apuesta de Arduh dentro de su quinteto. Confió su formación titular a cuatro pibes como Baralle, Chiarini, Lema y Juan Cruz Oberto, junto con un inicialista habitual como Roquez Johnson. Boca, con la baja confirmada de Delfino, no varió demasiado.
 
Esa apuesta fue productiva en un principio, aunque defensivamente costó hacer pie y un Atenas más enérgico reaccionó a rachas. Lampropoulos y Funes tuvieron un arranque furioso, con el base clavando dos triples consecutivos para sorprender y despegar al Xeneize a un claro 31-19. Atenas buscó remar contra la corriente, de la mano de un intenso Johnson, pero igual Boca se quedó con el primer capítulo (32-27).
 
El problema para el Griego fue cuando Johnson ya se cargó con la tercera falta apenas iniciado el segundo cuarto. Esto obligó a que Atenas mueva fichas, aunque en la otra vereda las cosas tampoco salieron del todo bien para un Boca que padeció las lesiones de Gargallo y más adelante Lampropoulos. Boca sostuvo ventajas, pero de a poco fueron llegando arrestos cordobeses para mantener un serio acecho. Atenas recortó a un interesante 53-49, pero la tendencia siempre favoreció al dueño de casa.
 
Afortunadamente para Boca, Gargallo reapareció en el reinicio de las acciones sin secuelas de la lesión que había sufrido en el segundo periodo. Y su actuación fue clave, porque el pibe se cargó la ofensiva del equipo en ese pasaje y su intensidad desequilibró el partido una vez más. Gargallo, junto a Funes y Lampropoulos, encadenó una ráfaga que dejó al Xeneize trece arriba (69-56 con menos de cinco minutos).
 
El Griego no bajó los brazos, dañó con Mickeal más Rasio-Johnson en el juego interior y luego se topó con un triple de Baralle para quedar a tres (71-68). Igual Boca siguió sin perder la brújula, no se desesperó y aprovechó el cierre del parcial para dañar a un Atenas que despistó: 80-70 y diferencia de diez unidades al último cuarto.
 
El parcial final no cambió la tendencia, Atenas siguió tratando de lograr una remontada prácticamente milagrosa pero Boca tuvo todo bajo control, porque el Xeneize respondió perfecto a cada embestida y lo fue cerrando cómodo. La fragilidad defensiva de los cordobeses jugó a favor de un Boca que tuvo alternativas, ya no solo en ese tridente tan rendidor de toda la noche como lo fue el combo Funes-Lampropoulos-Gargallo, sino también añadiendo otros puntos vitales como Gianella y Amicucci. Terminó siendo 114-103 para los de Ronaldo Córdoba, en una victoria que mantiene viva la esperanza.
 
 

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