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La enemistad de Kobe Bryant y Shaquille O'Neal fue uno de los momentos más tristes y decepcionantes en la historia de Los Angeles Lakers. La dupla que catapultó una dinastía dorada que resultó en 3 campeonatos se separó por egoísmo, discusiones y desacuerdos. O'Neal y Bryant se separaron en 2004 y su pelea duró años, hasta que finalmente, el tiempo arregló todas las heridas.

Bryant y O'Neal maduraron y dejaron su drama en el pasado mientras continuaban con sus carreras en diferentes equipos. De hecho, una de las razones más importantes por las que los dos se reconciliaron fue por el gran Bill Russell, quien alentó a O'Neal a dar el primer paso y hacer las paces. "Tenía órdenes del gran Bill Russell", dijo O'Neal a ESPN. "Él y yo estábamos hablando en Seattle, y él me decía cómo deberían ser las rivalidades. Me dijo que yo debería estrechar la mano de Kobe Bryant y dejar el pasado en el pasado” contó Shaq.

Cuando O'Neal se fue de los Lakers, la narrativa se centró en quién de los dos triunfaría sin el otro. Fue Shaq quien ganó su cuarto anillo con Miami Heat en 2006, pero Bryant lo alcanzó superando a Shaq no solo con uno, sino con dos títulos en temporadas consecutivas.

Antes de hacer las paces y compartir la cancha una vez más en el Juego de Estrellas de la NBA de 2009, O'Neal admitió que Russell lo inspiró a superar su conflicto con Kobe. La historia y la relación de ambos no fue siempre perfecta, pero siempre serán recordados por su legendaria etapa de éxitos que ningún equipo ni ningún otro dúo ha logrado desde su época.