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Si bien ambos equipos llegan con buenos pergaminos, todo señala que los de los angelinos son los verdaderos retadores. Los Clippers enfrentan un desafío importante en su próxima serie de playoffs. A pesar de tener una plantilla sólida, tendrán que enfrentarse a un equipo de los Suns que ha demostrado ser un contendiente legítimo para el título de la NBA. Los Suns han ganado ocho de los ocho partidos en los que ha jugado Kevin Durant, lo que destaca su influencia en el equipo y la dificultad que los Clippers tendrán en enfrentarlos.

Los Clippers se terminaron clasificando con una buena carrera final, con victorias vitales ante precisamente los Suns (con suplentes), Portland y Lakers. Una plantilla dirigida por Tyronn Lue, quien ha sabido integrar a un descafeinado Russell Westbrook a un esquema que por lo general ha sido sólido. Su gran desventaja es la baja de Paul George, una carta que todavía no han podido recuperar y que sería clave tanto en defensa como en ataque para frenar a los de Chris Paul.

El éxito de los Clippers en esta serie dependerá en gran medida de la capacidad de su estrella, Kawhi Leonard, para liderar el equipo. Leonard ha sido fundamental para los Clippers esta temporada, promediando 24,8 puntos, 6,5 rebotes y 5,2 asistencias por juego. Del otro lado, deberán orar por no tener desafecciones y mantener la plantilla, sobre todo el quinteto titular, ya que tampoco llegan sobrados valor desde la banca y su profundidad ha mermado con el arribo de Durant. Su último encuentro en postemporada fue en 2021, consignas similares, unos Suns favoritos que terminaron llegando a las finales y unos Clippers diezmados, en aquella ocasión sin Kawhi pudieron forzar hasta un séptimo partido.