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El Media Day de la NBA para los New Orleans Pelicans fue tranquilizante, dado el saludable regreso de Zion Williamson. El ala pivote parece haber trabajado mucho durante el verano, lo cual fue visible en su cambio físico durante las entrevistas que realizó, comparado alaño pasado.

Williamson estaba preparado para ser uno de los más dominantes de la NBA desde que fue seleccionado en el draft de 2019, pero las lesiones aún no lo han dejado establecer su marca. Zion jugó 61 partidos en su segundo año, promediando 27 puntos, 7,2 rebotes y 3,7 asistencias, pero se espera mucho más de él.

Hablando sobre sus aspiraciones para la próxima temporada, Zion dijo: "Te mentiría si dijera algo menos que un campeonato. Si tu mente no está puesta en ganar, entonces, ¿dónde está?... Ahora, va a ser un viaje. No va a ser fácil de ninguna manera. Tenemos que tomarlo juego por juego. Como dije, cuando hay momentos difíciles, son esos períodos los que realmente nos convertirán en un equipo campeón" sentenció.

Los Pelicans tuvieron una racha impresionante la temporada pasada, luchando por llegar a los playoffs a través del Play-In. Con la llegada de CJ McCollum y un Brandon Ingram mejorado, los Pelicans pudieron llevar a los Phoenix Suns a siete juegos en la primera ronda. Agregar a Zion Williamson a la rotación convierte a los Pelicans en una gran amenaza. Los jóvenes en la franquicia como Herbert Jones, José Alvarado y Trey Murphy han mostrado un crecimiento progresivo, lo que también les da una profundidad considerable, parte clave en cada equipo contendiente, como Memphis, cuando sorprendió a todos la temporada pasada. Ahora Zion y los Pelicans buscan arrebatar ese lugar.