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Tras la salida de Kevin Garnett en el año 2007, los Wolves hicieron muchos traspasos, pero su equipo cada vez iba a peor. Esa temporada la franquicia terminó con un record de 22-60 y al año siguiente con un 24-58. El 2009 era un año para levantar y el Draft era el momento. Iban en busca de un base que se pusiera el equipo al hombro con sus picks cinco y seis. En la primera de sus elecciones eligieron a Ricky Rubio y en la segunda a Jonny Flynn. ¿Quién salió en la siete? Stephen Curry.

Jonny Flynn, que se retiró en el Orlandina Basket de Italia por una lesión en 2015, jugó solo tres temporadas en la NBA mientras que Curry se convirtió en uno de los mejores jugadores de la historia de la liga, en el mejor tirador por encima de Larry Bird, entre otros grandes logros que agrandan la mala decisión del equipo que hoy si tiene a un base, como lo es D´angelo Russell, para cumplir las aspiraciones.