Informe

¿Qué es de la vida del Tola Cadillac?

19:18 25/11/2019 | El exbase de la selección argentina hace varios años que no dirige en la Liga Nacional pero, como buen enamorado de este deporte, sigue ligado a él.

El Tola con la camiseta de San Andrés, su club

Hay pocas personas que pueden alcanzar el mote de glorias. En el deporte se estila más, pero igualmente los que llegan a esa cúspide son contados con las manos. Uno de los privilegiados es Eduardo Osvaldo Cadillac, que para la gente de San Andrés, por ejemplo, es una leyenda, incluso más que una gloria del club. El Tola (nadie lo conoce por otro sobrenombre), hace varios años que no dirige y la semana pasada fue homenajeado por el Senado de la Nación como deportista ejemplar y recibió el premio "Delfo Cabrera". Por eso y por su enorme historia, lo llamamos para charlar un rato. 

- Felicitaciones por lo del Senado. ¿Qué te pasa cuando te hacen esos reconocimientos?
. Me puso muy contento. Como que el esfuerzo que uno hizo durante toda su vida en el deporte no pasó inadvertido. Eso me pone muy bien.

-¿Qué estás haciendo de tu vida en estos momentos?
. Hace 8 años que estoy en el club Unión Vecinal de Munro. Soy el entrenador de la primera división y coordinador de las divisiones formativas masculinas. La verdad es que estoy muy bien, muy cómodo, y contento de estar ahí. Estoy trabajando con gente que aprecio mucho, sobre todo el presidente y el vice, y los cuerpos técnicos de primera y menores. La paso muy bien. Gracias a eso, me siento vigente.

- Mantenés la relación con el barrio, evidentemente. 
. Y sí, me queda muy cerca, algo que en estos momentos es fundamental. Además de esto, hasta hace un poco tiempo que me jubilé, estaba también trabajando en la Municipalidad de San Martín, en deportes, con los jóvenes. 

-¿Y estás mirando la Liga?
. Veo, pero no mucho, porque a la noche entreno, y los días que puedo miro, pero no tengo demasiado entusiasmo, porque me da bronca que haya tan poca gente en las canchas y que no se sepa cuándo se juega. Estoy en contra del formato. Me gustaba más cuando se jugaba los fines de semana. Soy más tradicionalista.

-¿Y no te dan ganas de dirigir la Liga? ¿Cuánto hace que te fuiste?
. Y, ya hace 10 años. En Central Entrerriano. 

-¿Tuviste un momento de extrañarla?
. Y, al principio sí, como todos. Pero al poco tiempo fui a 3 de Febrero y luego acá a Unión Vecinal, entonces como me sentí muy bien no me pegó tanto. Económicamente es obvio que es distinto, pero no pasó por ahí. 

-¿Tuviste ofertas?
. No, pero tampoco hablé con nadie para que me tuviera en cuenta, salvo una vez que Claudio (Villanueva), me llamó para ser asistente del Che García en Quimsa. Pero no estaba para eso. Le agradecí al Che, pero no tenía la mentalidad para volver al tema de los viajes y demás. 

-¿A la selección la seguiste?
. Sí, fue espectacular. Increíble. Por eso llamó tanto la atención. Pensé que el recambio iba a tardar más. Se ve que se hicieron bien las cosas y justo cayó un grupo de jugadores y entrenadores perfecto. Nosotros tenemos entrenadores de primer nivel mundial. No tengo dudas. Hace años que la selección juega espectacular al básquet. Por eso nunca bajamos de la cima mundial. Creo que la continuidad de los entrenadores tuvo mucho que ver. 

- Te voy a saltear por varios temitas, ya que hace mucho que no hablamos. ¿Qué me contás de Prigioni? Vos lo hiciste debutar en la Liga como jugador, fue un crack y ahora como entrenador está de asistente en la NBA.
. Increíble. Él traía algo de base cuando lo fiché para Obras, aunque mi idea era que fuera un 1-2, porque se había lesionado Aragona. Él iba a ser el suplente de Cristian y de Dominé, pero como Aragona no se recuperó del todo, Pablo terminó siendo el base. Le costó un poco adaptarse, pero como siempre fue muy inteligente, se dio cuenta de lo que el equipo necesitaba. Después fue a Europa, la rompió y llegó a la NBA a los 35 años, así que eso demuestra lo inteligente que fue. 

- No es casual que más de la mitad de la Generación Dorada haya jugado al más alto nivel hasta los 37/40 años. 
. Ni hablar. El cuidado personal que tuvieron fue fundamental. Lo que hizo Pablo nunca me sorprendió. En Obras era el preguntón. Siempre se interesaba en lo que se podía hacer. Estaba en todos los detalles. 

- Si tuvieras que explicarle a un joven quién fue el Tola Cadillac y qué fue la dupla Cadillac-Raffaelli, ¿te animás?
. Uh, es complicado, pero me animo. Creo que fui un jugador, salvando las distancias, obviamente, pero para que tengan una idea, tenía un poco la velocidad de Campazzo, sin su defensa...bah, no me podría comparar nunca porque tiene todo este pibe ahora. Yo tenía gol, porque empecé de dos y terminé de uno. Me las arreglaba en los distintos torneos, sin ser alto, para hacer goles. Con Raffaelli nos conocíamos mucho y armamos un dupla importante en Obras y en la selección argentina. Y dejame decir otra cosa para los chicos. Esa generación, cuando no pudimos ir a los Juegos de Moscú, sin compararla con la Generación Dorada bajo ningún punto de vista, me hubiera gustado que tuviera esa oportunidad, porque era el mejor momento de esa camada, y tal vez hubiéramos conseguido algo importante. 

- Encima no pudieron jugar el Mundial anterior (1978) ni el posterior (1982).
. Claro, por eso nos quedamos con las ganas de ver qué podíamos conseguir en ese momento tan bueno de ese grupo.

-¿Si te apuro te viene un recuerdo inicial si te pregunto de tu etapa de jugador?
. Siempre me acuerdo de las inferiores en San Andrés. Ahí sí que nos divertíamos. En 6/7 años perdimos solo 3 partidos. Jugábamos con Beto Tanghe, Daniel Pace, Claudio Villanueva, Jorge Kojdamanián, Jorge Goñi... Éramos amigos, así que la pasábamos muy bien.

- Te viene antes eso que tu etapa profesional. 
. Y sí, porque era mi club, mis amigos y lo disfruté mucho. Después me acuerdo mucho también la etapa del sudamericano juvenil, que ganamos en Chile, en 1972. Ahí supe lo que era ser MVP, porque me nombraron mejor jugador del torneo. Ponerte la camiseta argentina era una cosa increíble. Estuvimos un mes concentrado en el club Teléfonos y ahora justo lo vendieron. El equipo titular era Beto Tanghe, yo, Choco (Raffaelli), Gustavo Aguirre y Pablo Sittoni. Después estaban Neukirchen, Claudio...

-¿En clubes lo más importante fue la William Jones con Obras?
. Sí, en 1983. En cuanto a títulos ganados, fue lo más importante. Después con San Andrés la Liga de transición, con River fui subcampeón de la Liga. Con San Andrés le ganamos a Barcelona un partido de la William Jones en 1985. Eso también fue inolvidable. Estaba el narigón Oroño, Luis González, Ernie Graham. 

-¿Y de la etapa de entrenador te quedó algo marcado?
. Sí, no haber sido campeón de la Liga. Si bien salí campeón sudamericano con Boca, me dio mucha bronca perder la final de la Liga 2005/06 contra Gimnasia de Comodoro. Yo dirigía a Libertad de Sunchales y teníamos la ventaja de localía. Se me lesionaron los dos extranjeros, si no creo que hubiese distinto. Jugábamos muy bien. Sepo (Ginóbili), la rompía. 

Fabián García / [email protected]
En Twitter: @basquetplus

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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