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Solo haremos la graficación de la idea con los ocho equipo que alcanzaron las semifinales de Conferencia y en todos, salvo en Toronto, ocurre al menos lo mismo con un jugador como mínimo. Es cierto que en la postemporada las rotaciones se achican, pero ha habido casos en los que jugadores de renombre quedaron directamente olvidados. 

Empecemos por el Este. Dijimos que Toronto no lo hizo, pero su vencedor, sí. Enes Kanter, el turco al que varios querrían en su equipo, venía siendo parte de la rotación e incluso jugo los 4 partidos en la serie contra Philadelphia, pero ante los Raptors murió: 2 ingresos apenas, de 3 y 4 minutos, respectivamente. Igual, siempre está listo y alienta como el mejor. Puede llegar a tener una nueva chance contra Miami. O no.

El Heat justamente tienen un par desterrados. Uno es obvio, Udonis Haslem, porque su figura tiene más que ver con una especia de padre de los más jóvenes. Con 40 años, Udonis fue clave, de hecho, en la reunión de los jugadores donde se resolvió seguir jugando la burbuja tras el episodio con los Bucks. No está aquí para jugar. Distinto es lo de Meyers Leonard, que sí fue rotación, llegó a entrar en los seeding games, pero luego se perdió en el banco. En los playoffs, 1 partido (9 minutos), contra Milwaukee, y ya.

Su vencedor, Milwaukee, tuvo dos casos similares: Robin López y Ersan Ilyasova. El hermano de Brook jugó 6 de los 8 seeding games, después entró en 3 de los 5 contra Orlando y contra Miami se despidió de la burbuja. El caso del turco fue casi idéntico. Entró en 7 de los 8 seeding games, y lo mismo que Robin: 3 contra Orlando y nada contra Miami. Víctimas claras de la rotación minimizada.

Por el Oeste, digamos que Denver, la revelación del momento, le dio buenas chances al pibe Bol Bol de lucirse en los seeding games y, cuando llegaron los playoffs, le dijeron "gracias, miralos desde afuera". Solo entró en 3 partidos de postemporada, cuando venía con mucha participación en la previa. 

En Houston está el caso más paradigmático de todos: Tyson Chandler. El pivote, luego de la salida de Capela en febrero, se despidió del juego. Tiene 37 años y por eso ya no lo sufre demasiado, pero su caso es tan absurdo que en Orlando solo entró en un partido para tirar dos libres (su planilla quedó en cero segundos), y encima erró los dos. Igual, él está feliz y siempre se mostró como soporte de sus compañeros. 

Los Clippers tienen dos casos bastante distintos. Nadie podía esperar que utilizaran demasiado a Joakim Noah, que si bien jugó algunos partidos en Orlando antes de los playoffs (5), ya por los porotos importantes solo vio acción en uno contra Dallas, y solo 5 minutos. Patrick Patterson en cambio, sí era parte de la rotación, promediando 15/18 minutos en los seeding games, pero en playoffs desapareció por completo, jugando solo 2 partidos, 5 y 4 minutos, respectivamente. 

Por último, los Lakers también tuvieron sus casos, aunque diferenciados. Tampoco se esperaba mucha participación de JR Smith, aunque tras jugar dentro de todo bastante contra Portland (4 partidos), ante Houston solo fue tomado en cuenta para ocasiones puntuales, entrando dos veces 3 y 4 minutos. Luego está el caso de Howard, que no viene jugando, pero porque el cambio estratégico contra los Rockets hizo que Vogel dejara de utilizar a sus dos pivotes grandes: él y McGee.