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La mala suerte que Joel Embiid ha tenido en el comienzo de su carrera con respecto a las lesiones es increíble. El interno, tercera selección del draft del 2014 por Philadelphia, se perdió sus dos primeras temporadas de la NBA como consecuencia de una lesión en su pie derecho. Ahora, en su año de rookie, la mala racha no pudo quebrarse y a principios de marzo tuvo que frenar su temporada por una lesión en su rodilla izquierda.

Finalmente, el pivote se había roto los meniscos y en la jornada de ayer se le realizó una operación menor en Los Angeles, la cual resultó absolutamente exitosa. De esta manera, dentro de dos semanas podrá estar apto para entrenamientos de levantamiento de peso en aproximadamente dos semanas.

Cabe recordar que por las lesiones que había sufrido en el pasado, el cuerpo técnico de Philadelphia lo ha llevado de a poco a Embiid. Por ejemplo no jugó partidos back to back y solo disputó 31 en total, con un promedio de 20.2 puntos, 7.2 rebotes y 2.5 tapones, en una media de 25.4 minutos. Este nuevo parate lo dejará fuera de la lucha del premio al Novato del Año, pese a sus excelentes números, ya que nunca lo ha ganado un jugador con menos de 50 partidos.