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Golden State sufrió tres ausencias muy importantes en la noche de sábado, ya que Steve Kerr no pudo contar con Stephen Curry, Shaun Livingston ni Draymond Green. No obstante, la enorme cantidad de talento de los Warriors hizo posible que sobrellevaran esta merma y le ganaran a uno de los mejores equipos defensivos de este inicio de temporada: Brooklyn Nets, por un marcador 116-100.

Los Nets, franquicia en la que Pablo Prigioni trabaja como entrenador asistente de Kenny Atkinson, pudieron mantenerse competitivos durante los primeros veinte minutos del partido; pero en las posiciones finales de la primera mitad se produjo un parcial 9-2 en favor de los dueños de casa, que les permitió llegar al entretiempo 65-53 arriba en el marcador. La racha positiva se extendió en el inicio del complemento: un parcial 7-0 estiró la ventaja de Golden State a 17 unidades (72-55), la cual fue irremontable para Brooklyn, que empeoró su récord a un balance 6-7.

Joe Harris fue el mejor jugador de los Nets en San Francisco, ya que aportó su mejor marca goleadora de la temporada: 24 puntos. También es para destacar la siempre completa tarea de Spencer Dinwiddie (14 puntos y 6 asistencias) y la labor de D'Angelo Russell (12 puntos y 5 rebotes). Por el lado de los Warriors, Kevin Durant culminó con un doble doble (28 puntos y 11 rebotes) y hubo una gran noche anotadora de Quinn Cook (27 puntos) y de Klay Thompson (24 puntos).

La noche del lunes marcará el cierre de una gira de cuatro partidos en condición de visitante y una nueva oportunidad para regresar a la senda del triunfo. Su rival serán los Timberwolves, que están en plena reestructuración luego del traspaso con Philadelphia que incluyó a Jimmy Butler.