NBA

Historias de Draft: 1985 y la nulidad de la elección de Sabonis

23:04 11/05/2020 | Ese año, el siguiente al mejor de la historia, en donde estuvieron Olajuwon y Jordan, Atlanta seleccionó al lituano, pero no fue aceptada.

Sabonis en el Mundial de 1986 con Bogues y Smith

La elección del draft de 1984 había sido de las más impactantes de la historia. Olajuwon en el puesto 1, Jordan en el 3, Barkley en el 5, Stockton en el 16. Hoy, 36 años después, se lo considera el mejor draft de todos los tiempos. Por eso quizá el de 1985 quedó un tanto en el olvido. 

Es cierto, no tuvo el mismo nivel, aunque saldrían de allí varias estrellas, incluidos tres jugadores del Dream Team real de 1992: Patrick Ewing (número 1), Chris Mullin (7) y Karl Malone (13). Pero hubo muchos otros excelentes jugadores, como Charles Oakley, Joe Dumars, AC Green y varios más. También aquí fallaron los primeros. Indiana en el 2 eligió a Wayman Tisdale y los Clippers, en el 3, a Benoit Benjamin.

A propósito de Benjamin, el de 1985 fue un draft con muchísimos jugadores que luego vinieron a la Liga Nacional: Benjamin (1º ronda, número 3); Kenny Green (1-12), Carey Scurry (2-37), Lorenzo Charles (2-41), Barry Stevens (2-43), Leonard Allen (3-50), Charles Bradley (3-51), Andre Goode (3-60), Richie Adams (4-81), Joe Atkinson (4-85), Derrick Gervin (4-90), Dexter Shouse (4-92), Michael Schlegel (5-96), Eric Boyd (7-141) y Mario Elie (7-160). 

Volviendo al tema que nos ocupa, hubo dos europeos que tenían muy buenos antecedentes. Fernando Martín, elegido por New Jersey Nets en la segunda ronda con el número 38. Y el joven soviético Arvydas Sabonis, seleccionado recién en la cuarta ronda por Atlanta Hawks, con el número 77. 

Aquí hay un par de curiosidades. Primero, la elección de Martín con 23 años. En ese entonces se podía. Lo que no se podía era elegir menores de 21 años, y eso fue lo que hizo Atlanta al seleccionar a Sabonis, que al momento del draft todavía tenía 20 (19/12/64). La cuestión es que la elección fue anulada por la NBA y los Hawks nunca tuvieron sus derechos. Entendamos también el contexto: en 1985 era improbable que un soviético jugara en la NBA. Alexander Volkov y Sarunas Marciulionis, en 1989, serían los primeros. Volkov en...Atlanta. 

Dice alguna leyenda que los directivos de Atlanta tenían mal la fecha de nacimiento de Sabonis y pensaron que era clase 63, algo que hoy sería imposible que suceda (el error), pero que en esos tiempos podía ocurrir. La cuestión es que la NBA no aprobó el voto.

No sería esa, sin embargo, la única posibilidad del gigante lituano. Al año siguiente, después de romperla toda en el Mundial de España y poner en aprietos al mejor pivote que tenía Estados Unidos en ese momento, David Robinson, la figura de Sabonis tomó mayor difusión y, en 1986, no pasó de la primera ronda y Portland lo elgió ahí, en el puesto 24. 

Eso sí, el romance tardó mucho en concretarse. Sabonis se quedó en el Zalgiris hasta 1989, en el que se abrió la frontera soviética. Ahí aprovechó y se fue al Valladolid español hasta 1992 y luego 3 años más al Real Madrid, donde se consagró campeón de Europa en 1995. Ahí, con 30 años, recién dio el salto a la NBA, 9 después de haber sido elegido por los Blazers. 

Lo demás, ya es sabido: 7 años con Portland, la sensación de que su tiempo en la NBA debió ser antes, pero igual un derroche de talento sin igual para un tipo de 2.20 que jugaba y tenía los fundamentos de un base. Arvydas, el gigante lituano, hoy tiene en la NBA a su hijo Domantas, que lo hace muy bien, pero sin poder tapar el sol que significó su padre para la historia del básquetbol mundial. 

 

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