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Indiana perdió un partido increíble. Los Pacers fueron sorprendidos por Philadelphia 76ers y cayeron por 93-92 en un final tremendo. Michael Carter-Williams, a falta de 9.9 segundos del final, decretó la derrota del equipo de Frank Vogel con un doble agónico.

Indiana tenía una buena oportunidad de mantener su levantada en la NBA ante un rival que no aparentaba ejercerle mucha pelea en la previa. Sin embargo, el penúltimo clasificado de la Conferencia Este (solamente supera en récord a los muy pobres New York Knicks) dio batalla, complicó las aspiraciones de los Pacers e incluso se terminó llevando un triunfazo en el final. La mejor reacción de Philadelphia se puede reflejar en los números del tercer periodo, aunque lo cierto es que el equipo mostró una cara muy positiva durante todo el partido, sabiendo reaccionar a unos minutos iniciales adversos y emparejando la balanza poco a poco.

El arranque favoreció a Indiana, que de la mano de West y Stuckey clavó un arranque de 10-2 y parecía cumplir los pronósticos de la antesala. Pero Philadelphia no dejó que la visita se escapase, metió dos bombazos filosos con Covington y Wroten, y en un abrir y cerrar de ojos empardó la situación: 10-10. Watson y Miles volvieron a encabezar triples, aunque ahora para Indiana, que sacó una diferencia de 21-13 y simuló nuevamente empezar a dispararse. Nada de eso ocurrió porque los 76ers mejoraron en los últimos tres minutos, con una defensa tremenda y un parcial de 6-0 que los arrimó en el score (21-19).

Los Pacers habían comenzado a sentir el rigor de la defensa local, razón por la cual les costó muchísimo anotar y debieron enfocar su juego a los triples, aunque allí carecieron de puntería y el déficit de gol se fue incrementando. No obstante, Indiana dominó el tanteador, sin sacar grandes diferencias pero llegando a controlar por una brecha de hasta ocho unidades (39-31) aprovechando sus idas a la línea de libres.

En el cierre del parcial Philadelphia, que había tenido cierto bajón en su goleo en el meridiano del periodo, empezó a encontrar puntos con Carter-Williams, Covington y Grant, éstos últimos dos añadiendo triples. Con ese pequeño envión, Los 76ers equilibraron levemente la balanza pero no pudieron cambiar el curso del marcador porque en la otra vereda West tuvo un buen cierre para los Pacers. Así, Indiana entró al descanso largo arriba por 49-43.

El inicio del tercer periodo empezó a ser determinante, Indiana decayó en su ofensiva producto de la gran oposición de los 76ers y el panorama se oscureció. Los de Vogel estuvieron cinco minutos sin anotar tiros de campo (solo dos libres por parte de Hibbert) y en ese tiempo el rival se aprovechó para pasar al frente en el tanteador: 55-52.

Está claro que si era otro el contrincante el trámite podría haber sido más desalentador, pero lo cierto es que Indiana estuvo casi ocho minutos sin puntos de cancha, solamente acercando algunos libres. De todas formas a Philadelphia les costó, y solamente empezó a soltarse restando cuatro minutos para el cierre, con tres triples al hilo que empezaron a desnivelar el juego (Wroten, Sampson y Grant los autores de las bombas). Los 76ers pasaron a ganarlo 69-62 pero luego se pincharon, Indiana aprovechó para volver a liderar el marcador pero sobre el final del parcial dos libres de Wroten le dieron la ventaja al local por 72-70.

El comienzo del último periodo fue netamente positivo para Philadelphia, que aprovechó el hecho de estar más dulce en ofensiva que su rival y llegó a adelantarse por 82-74 a nueve minutos del cierre. La diferencia, dada la paridad con la que se venía desarrollando el pleito, parecía ser definitoria, los 76ers controlaban y quienes tenían la obligación de revertir la difícil situación eran los Pacers.

Pero al dueño de casa le costó mantenerse al frente con esa tranquilidad lograda, Indiana reaccionó bien con Stuckey (triple importante), West e Hibbert, y el final del encuentro tomó un color dramático: 84-83 para Philadelphia a falta de tres minutos. El pleito se puso mucho más picante, en ese cierre se intercambiaron el liderazgo del score y la historia parecía tener un final sufrido pero feliz para Indiana cuando West metió un doble que puso el score 92-91 a falta de 17 segundos. Pero Philadelphia metió cambios para el cierre, volvieron al parquet Wroten y Sims, Covington sufrió un tapón de West cuando quiso anotar pero el rebote lo volvieron a tomar los 76ers y esta vez no hubo oposición ante el lanzamiento de Carter-Williams: 93-92 para el dueño de casa restando menos de 10 segundos.

La jugada final quedó en manos de Indiana aunque West, de excelente labor con 28 puntos y emergiendo como el máximo anotador de la noche, marró su tiro sobre la chicharra y el final del partido terminó sonriendo a unos 76ers que sufrieron pero se quedaron con un triunfazo para bajar a los Pacers.

Luis Scola salió del banco de suplentes y completó 5 puntos (2/9 en dobles y 1/5 en libres), 5 rebotes, 3 asistencias y 3 faltas en 17m01s de juego.