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El primero fue el único cuarto que tuvo marcada paridad en la noche de la Bombonerita. Cada uno mostró sus cartas, por el lado local 11 de Pablo más el buen aporte de Facello y Pereyra, mientras que por el elenco correntino Méndez, Vallejos y el brasileño Domínguez se hicieron cargo de la responsabilidad ofensiva, dejando como saldo un apretado 22-21 favorable al anfitrión luego de diez minutos.

Ya en el segundo el conjunto de Vallet lo empezó a destrabar. En este caso fue Manu Rodríguez, con un rutilante ingreso, el encargado de tirar del carro en ataque sumando 10 unidades fundamentales para que la diferencia sea cada vez mayor. Al neuquino se le acoplaron Pérez, Pereyra y Facello, dejando entre todos a Boca arriba por una muy buena ventaja (51-39) a la hora de irse a los vestuarios.

El tercer cuarto no ofreció demasiada emoción en lo que se refiere al resultado. Reapareció la versión determinante de Aaron Pablo (11 en el parcial) y eso fue demasiado para un San Martín que ofreció voluntad, que tuvo minutos interesantes de Méndez, pero que siempre corrió de muy atrás. El 73-57 final grafica la clara superioridad de Boca en los tres primeros cuartos del encuentro en el Conde.

Tal como se esperaba, los diez minutos finales sobraron. Un buen arranque de Pereyra (7) estiró la máxima a 82-62 y liquidó las esperanzas correntinas. Los últimos minutos se jugaron casi a reloj corrido y sirvieron para terminar de sellar una victoria más de Boca en La Liga de Desarrollo, empezando a pensar en la recta final de la temporada. La visita no pudo repetir lo del Pando y cayó sin atenuantes.