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Muchas veces se ha contado la historia de Nicolás Aguirre y como en pocos meses pasó de estar afuera de la Liga, a transformarse en el MVP de la temporada 2014/15. Su renacer en Quimsa en esa campaña fue magnífico y hoy lo encuentra consolidado como uno de los jugadores más determinantes de la competencia. De hecho, de aquel 2014 en adelante, ningún otro protagonista ha tenido el éxito del base santiagueño.

Comenzando la seguidilla con el título del Súper 8 2014, Aguirre ha disputado cinco de seis finales posibles. Las tres de la Liga Nacional, el mencionado Súper 8 y el reciente Súper 4. El único que se le escapó al Penka fue el Súper 4 2015, al cual San Lorenzo directamente no se clasificó, en medio de una epidemia de lesiones que había atacado al conjunto de Lamas por aquel entonces.

De esta manera, nos encontramos que Aguirre no solo ha llegado a la final de los últimos cinco torneos locales que jugó, sino que además aún no perdió ninguno de ellos (cuatro títulos y obviamente todavía no se jugó el cruce ante Regatas). Un verdadero monopolio del éxito, que no lo tiene como una presencia testimonial, sino como un partícipe clave de esos logros.

El primer paso de la racha llegó el 20 de diciembre del 2014. Quimsa superó como local a Obras por 90-81, llevándose el Súper 8 en lo que representó su primer campeonato nacional. Aguirre acabó siendo elegido como el MVP de aquel torneo, tras anotar 16 puntos en la definición.

El siguiente festejo llegaría algunos meses más tarde, el 15 de julio del 2015. En un partido muy sufrido, Quimsa venció a Gimnasia en Comodoro por 70-68 y liquidó la final de la Liga 2014/15 por 4-2. Más allá de promediar 9,5 unidades en aquel cruce, Aguirre había sido clave para alcanzar esa instancia, quedándose con el MVP de la fase regular.

El próximo título se haría esperar algo más de 11 meses. El 23 de junio del 2016, ya representando a San Lorenzo, Aguirre participó de la victoria del Ciclón ante La Unión por 87-81, cerrando la llave con una barrida (4-0). El base tuvo un cuarto juego maravilloso, finalizando con 17 tantos, 6 asistencias y 4 rebotes.

Por último, el 7 de enero pasado, llegó la cuarta de forma consecutiva: San Lorenzo derrotó como visitante a San Martín por 70-59, coronándose en una nueva edición del Súper 4. ¿Qué hizo el Penka? Otra actuación muy positiva: 11 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias.

Ahora, el base santiagueño pone la racha en juego ante Regatas, desde el próximo martes 4 de julio. ¿Seguirá acumulando alegrías o podrán Quinteros y compañía ponerle un freno a este dominio prácticamente exclusivo?