Femenino

Santander: "Lo que hizo Reggiardo fue una falta de respeto"

22:34 19/08/2015 | El entrenador de la selección femenina bronce en Edmonton habló con Básquet Plus del Preolímpico y también sobre la polémica con la jugadora.

Santander festeja el bronce ante Brasil (Foto FIBA Américas)

Ya había dicho que no iba a hablar del tema Reggiardo hasta que terminara el Preolímpico, y cumplió. Cristian Santander llegó ayer a la Argentina tras el excelente Preolímpico de Edmonton y charló con Básquet Plus de la tremenda actuación, como así también de la polémica que se armó con Paula Reggiardo tras su renuncia tras los Panamericanos.
 

- Contame un poco. ¿Algo pasó en este tiempo para que Argentina haya tenido semejante torneo?
. Y, la verdad es que hay varias cosas. Primero, el rendimiento de nuestras jugadores en el exterior fue muy positivo. Llevan varios años consolidadas Debora González, Maccarena Rosset, Melisa Gretter, Gisela Vega, Stephy Thomas...este año salió también Sandra Pavón a Brasil. Eso fue importante. Juegan en el puesto que tienen que jugar, cuando acá a veces por ser altas las hacen jugar en puestos que no son adecuados para la selección y las tenemos que correr. Otro punto creo que fue la SuperLiga, porque ayudó a tener roce con jugadoras extranjeras y que las mejores argentinas compitan entre sí.  El tercer punto creo que, como todo proceso, el mío, transitando el tercer año, hizo que haya mayor conocimiento mío de las jugadoras, y de las jugadores hacia mí también. Esos para mí fueron los tres puntos.
 
- Las chicas este año debieron juntar unos 50 partidos entre SuperLiga y los otros torneos que jugaron. Eso antes no existía.
. No, seguro. Antes tenían menos, pero por sobre la cantidad, lo más importante fue la calidad. En Toronto y en Edmonton, 10 de las 12 jugadores nuestras venían de jugar la SuperLiga. Y las dos que no jugaron fue porque estaban en el exterior.
 
-¿Y cómo eran tus expectativas y tus dudas antes de salir?
. Cuando definimos con la Confederación la llegada de la SuperLiga y sus fechas, para que estuvieran las chicas que juegan en el exterior, debíamos ceder nosotros parte de nuestra preparación, pero entendíamos que era importante, que la Confederación quería darle finalmente una competencia de jerarquía al básquet femenino, entonces nos pareció bueno dejar un poco de lado nuestra preparación, y eso implicó tener poco tiempo para entrenar, y claro que generó dudas, porque es difícil llegar bien con poco tiempo de trabajo. Pero creo que sirvió mucho ese roce finalmente.
 
-¿Y cómo habías quedado con el rendimiento en los Panamericanos?
. Yo quedé conforme, porque nos tocó un grupo duro, con Cuba y Canadá, y estuvimos en partido los dos, más allá de perder por 13 o 14 puntos ambos. Después ganamos los otros dos y me habían quedado buenas sensaciones.
 
-¿Dónde empezó a hacer el clic el equipo? Porque algo ocurrió durante el Preolímpico.
. Hubo una charla muy importante en Edmonton, donde nos juramentamos por decirlo así, conseguir algo importante, y escuchamos un mensaje de Hugo Sconochini que nos acercó Alejandro Cassettai, donde Hugo empezaba diciendo “Hola hermanitas de camiseta”, y la verdad es que eso fue algo muy importante. Nos empezamos a dar cuenta de que íbamos a estar bien.  
 
- Me sorprendió el concepto de juego que tuvieron, muy distinto al de hace unos años. Sabían qué querían hacer, cómo hacerlo, y lo ejecutaban.
. Las mujeres son más aplicadas que los varones. Vengo de dirigir el TNA. Tienen el sentido común de la limitación física que tienen y no inventan nada. Los varones se la pasan inventando, y eso a veces es bueno, pero a veces no. Cada día está mucho más táctico el básquet en general, y el femenino no le escapa a eso.
 
- Hablemos del torneo. ¿El partido con Venezuela les dio el toque extra de confianza?
. Puede ser, porque Venezuela viene en alza, sumó una española nacionalizada, y nosotros lo jugamos muy bien. Fue la obtención del pase a las semifinales. Teníamos la obligación de ganar, pero había que hacerlo, y fue un alivio.
 
-¿Por qué creés que se rompió el malificio con Brasil?
. Creo que se juntaron varias cosas. Nosotros en un muy buen momento del torneo, ellos con algunas dudas. Nosotros le habíamos ganado a nuestros rivales hasta ahí mejor que ellos a los suyos, y teníamos un deseo muy grande de romper la historia. Les trasladamos la presión, tuvimos un comienzo muy bueno y después supimos cerrarlo. Pero veníamos hace años, ya con Pinto y con Santín, de estar cerca de ganarles. Era de esperar que en algún momento ocurriera. 
 
-¿Qué pasó al otro día? Venían de ganarle a Brasil, día libre y víspera de una semi ante Cuba, con la posibilidad de la clasificación olímpica cerca, más allá de lo difícil que seguía siendo.
. Ese día, sabiendo que evitábamos a Canadá en el cruce, era todo expectativa y ansiedad. Entrenamos y teníamos mucha fe en poder ganarlo y llegar a la final. Teníamos la autoestima muy alta. Lamentablemente empezamos mal, pero pudimos volver al juego y, como pasa en los suplementarios, la moneda cayó del otro lado. Tuvimos chances, pero no se pudo. Pero se generó un clima en el que sentíamos que el rival que nos ponían enfrente pensábamos que podíamos ganarle. Creo que nos merecíamos jugar la final.
 
- Falta de costumbre también de jugar partidos importantes.
. Seguro, tenemos que jugar más veces este tipo de partidos. Nosotros habíamos jugado casi todos los partidos previos muy abiertos, nunca uno cerrado, salvo Brasil. 
 
-¿Te sorprendió que no se cayeran y salieran así a ganarle otra vez a Brasil?
. Un poco sí, porque fue muy difícil el post partido con Cuba. Fue un golpe, pero tenían un gran deseo de subirse al podio. No habíamos tenido tiempo de masticar la bronca, pero tuvimos la capacidad de llegar enteros. Y querían demostrar que ganarle a Brasil una vez no era casualidad.
 
-¿Del Repechaje podés hacer un análisis aunque falte mucho?
. Los 4 europeos salen con ventaja. Después, hay que esperar los clasificados que faltan, pero creo que estamos en condiciones contra todos. Y me tengo fe también contra los europeos. También hay que ver qué grupo toca, porque un europeo va a cada uno de los cuatro grupos. Siempre va a ser duro mientras jueguen solo 12 países. Quiero tener los pies sobre la tierra, pero creo que es probable y espero que las jugadoras lleguen en un buen momento.
 
- Te tengo que preguntar por lo que pasó con Paula Reggiardo. 
. Para mí fue una falta de respeto de ella, porque primero ella renuncia, argumentando entre otras cosas que tenía pocos minutos, algo que me parece que no corresponde en una selección. Después se encargó de aclarar algo que no sé quién se lo pidió, pero no cuenta la otra parte de la historia. Cuando regresó de España, no pudo entrenarse con la selección nunca: por sus molestias musculares o por otras cuestiones. Así y todo yo la confirmo entre las 12 para los Panamericanos, antes de terminar la SuperLiga. Ella juega el F4, 35 minutos cada partido, el lunes damos libre, el martes va a entrenarse y lo hace solo media hora porque tenía molestias. Se fue sola a kinesiología y el jueves salíamos. No se entrenó nunca con nosotros. Es verdad que un día antes yo la quise desafectar, pero porque no se entrenó nunca. Con el club jugaba y con nosotros se cuidaba. No se puede. Y hacer toda una parodia aprovechándose de la difusión que tomó por la foto en el colectivo me pareció por lo menos desmedido y contando una campana que no correspondía. Los trapitos sucios se limpian en casa me enseñaron a mí. Y si había alguna diferencia, como ocurre en todos los equipos, creo que no era para salir a aclarar tanto. No ayudaba en nada a un equipo. Si no quería estar más, entendía la renuncia. En su momento no salí a aclarar nada porqe estaba concentrado en el torneo, que era muy importante, ni a responder, pero hoy sí puedo decir que fue una falta de respeto total, ensuciando al cuerpo técnico, sin contar completa la versión.
 
-¿Afectó al equipo?
. No, al equipo no. Una selección no hace el duelo de nadie. Ha pasado gente muy importante en tantos años de selección, que se le reconoce su trayectoria, que no nos íbamos a poner mal porque una jugadora dio un paso al costado.
 
-¿Vos pensás que físicamente no estaba para jugar?
. Ella lo decía. Se cuidaba de entrenar para llegar a los partidos, y yo le decía que era al revés. Que se tenía que entrenar para llegar bien a los partidos. Incluso en su declaración dijo que consensuó con el kinesiólogo y el médico no entrenarse. Nosotros no concebimos eso. Que una jugadora pueda ir sin entrenarse nada.  ¿Cómo pudo jugar 35 minutos el sábado y 35 el domingo y con nosotros no podía entrenarse? Entendemos que un jugador quiera cuidarse, pero no entrenarse no tenía sentido. De hecho, el miércoles que yo la desafecto, decisión stand by para ver si podíamos sumar a otra jugadora, porque al otro día viajábamos, ese día se entrenó normal. No tuvo ninguna dolencia. ¿Podías entrenar o no? No me cerraba. Ahí fue a los Panamericanos y se entrenó y jugó todos los partidos sin problemas. No fue más al kinesiólogo. La realidad es esa. Cuando ella habló contó lo que le convenía, no todo.
Fabián García / [email protected]
En Twitter: @basquetplus

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