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Luis Scola fue el deportista elegido por el COI para tomar el rol de Emabajador de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018. El lugar de la presentación fue el Club Gimnasia y Esgrima de Villa del Parque, en donde Luis pasó una mañana agradable junto a 300 chicos. El evento se cerró con una conferencia de prensa, en la que no solamente pudo preguntar la prensa, sino también los chicos. 

Con respecto al recambio y al cambio de expectativas que ello conlleva, el capitán argentino fue conciso: "Veo bien a la selección. Estuvimos durante 10 años compitiendo al primer nivel internacional, dentro del Top 3, eso es algo que no es normal y es muy difícil volver a eso. Nosotros podemos tener un buen plan, un bueno proyecto, un buen trabajo y tener cierto éxito, que no necesariamente tienen que ser medallas olímpicas. Pero creo que si nosotros tenemos la cabeza lo suficientemente fría como para entender la situación y para trabajar de la forma correcta, tenemos un futuro en el cual todos deberíamos estar esperanzados. Creo que nos va a ir muy bien. Tenemos materia prima como para hacer algo, despúes hay que hacerlo, que es la parte difícil. Pero si no tenés la materia prima es imposible".

También se expresó en relación a lo que le deparara su carrera en básquet chino: "Es una oportunidad muy relacionada con una de vida, cultural, con una necesidad de vivir una nueva experiencia. Tuve la oportunidad de jugar en un montón de lugares diferentes, pero todo lo que fue el éxito deportivo estuvo genial y lo disfruté muchísimo, pero una de las cosas que más me marcó a lo largo de mi carrera fue la posibilidad de mezclarme con diferentes culturas. Tuve la oportunidad de vivir en Canadá, Estados Unidos, España y en cada lugar aprendés e inculcás cosas para tu propia familia y tu propio estilo de vida. Te abre la cabeza y te permite vivir experiencias desde adentro, que solamente podés experimentar con este tipo de situaciones. No solamente jugando al básquet, hay muchas maneras de vivir en otro país y de abrir tu cabeza. Hoy en día tengo la oportunidad de ir a un lugar totalmente diferente, que me intriga muchísimo y creo que me va a dar mucho a nivel cultural y social, así como también la posibilidad de seguir jugando al básquet, que todavía tengo ganas de hacerlo".

Ante la pregunto incisiva de uno de los chicos que formó parte de la clínica, que estuvo referida a la eventualidad del retiro, Luis también fue claro y respondió sin rodeos: "Estoy pensado en el retiro, soy profesional desde que tengo 15 años".