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Recibió la pelota y sin pensar la volcó a dos manos con mucha fiereza, siendo posteriormente ovacionado por el público que estaba presenciando el partido. Su nombre era Rubén Wolkowyski y había anotado, los dos primeros puntos de un argentino en la NBA, en el partido que Seattle SuperSonics le ganó como local a Denver Nuggets (112 a 99). 

Era el segundo partido de Wolkowyski en la NBA y, a contra de muchos escépticos, jugó 13 minutos, anotó dos puntos (1/4 en dobles), tomó tres rebotes, perdió una pelota y realizó una falta. 

Los dos puntos del oriundo de Chaco llegaron de la mejor forma, mediante una volcada áspera y dura, fiel a su estilo aguerrido, con más fuerza que talento. Todo se dio cuando faltaba un poco más de un minuto para terminar el tercer cuarto. Ruben Patterson lo vio y le dio un pase cuando el argentino se encontraba en la línea de los suspiros. Al recibir el balón, el Colo vio el camino despejado y no dudo, haciendo dos pasos y poniendo la basura en su lugar.  

Inmediatamente después, el cartel electrónico puso la frase slam dunk (volcada en español) y Wolkowyski se sacó las ganas de convertir, algo que no había podido hacer en el partido inicial. 

"Estuve mucho más relajado que el martes, la verdad que me sentí como en casa, así que espero lograr la tranquilidad total para rendir de la mejor manera", dijo Wolkowyski después del partido, quizás sin tomar magnitud de lo que había logrado. Fue el primero de muchos puntos argentinos en la liga norteamericana. El primer amor, aquel que siempre tiene más sabor.  

Ignacio Miranda/ [email protected]
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