Entrevista

Bryan Carabalí: el gigante ecuatoriano al que le encantaría ser argentino

19:29 01/02/2021 | Nació en Ecuador, mide 2,15, tiene 21 años y hace algo más de uno que aterrizó en Quimsa, luego de un paso corto por Brasil. Explotó y ahora dice sin dudas: "No dudaría en nacionalizarme".

Bryan Carabalí, cerca de un cesto que lo tiene a unos pocos centímetros de su enorme cuerpo (Foto LNB Contenidos)

En la Liga Nacional 2020/21 han pasado innumerable cantidad de cosas nuevas. Jugar en burbuja, sin público, con una pandemia amenazante, con pocos extranjeros, con barbijo, sin poder besarse, ni abrazarse. Y, también, se ha visto a un chico con unas condiciones físicas como pocas veces antes. Su nombre es Bryan Carabalí, nació en Ecuador, tiene 21 años, mide 2.15 y un cuerpo tallado como para ni imaginar dónde está su techo. 

- Contame tu historia. 
. Nací en un pueblo de Ecuador, un cantón, llamado cantón San Lorenzo, de la provincia de Esmeralda, el 24 de agosto de 1999. Siempre fui muy alto, pero me empecé a desarrollar más desde los 12 años. Antes jugaba al fútbol. Al básquet empecé tarde, a casi a los 18 años, porque me pidieron que lo hiciera para mi colegio en un interescolar. A mí no me gustaba el baloncesto, pero como me prometieron que me iban a ayudar con algunas materias de la escuela en las que no andaba bien, dije que sí. Mi papá se enojaba conmigo porque me decía que mi futuro estaba en el básquet, pero yo quería ser futbolista. La cuestión es que jugué, salimos campeones, me fue bastante bien, porque aprendí rápido los conceptos básicos del juego, y desde ese día me encantó el básquet y dejé el fútbol. 

-¿Nunca habías estado en un club?
. Cuando terminé la secundaria, me mudé a otra ciudad, porque en mi cantón no había basquet. Entonces sí fui a un club. Yo me propuse por ese tiempo salir adelante por medio del básquet. Fui a un equipo de la Federación de Guayras, y luego en un equipo de las Fuerzas Navales. No era algo estable. Iba a jugar por barrios los fines de semana. Hasta que me conocieron y entonces fui a Juvenil de Vinces, a jugar la Liga de Ecuador. 

-¿Pero cuando tenías 18 nadie te vio como para reclutarte?
. A los 18 medía 2.05 más o menos ya, pero la verdad es que nadie me vio. En Ecuador nunca tuve mucho apoyo, y lo poco que he conseguido ha sido por mi propio esfuerzo. La única oportunidad que tuve fue en la Liga. Acá en Argentina veo que le llamo la atención a muchas personas, pero en Ecuador me veían como a un juvenil más. Por suerte apareció alguien que es el capitán de la selección de Ecuador, Raúl Cárdenas, que me ayudó desde un principio y me consiguió el fichaje en Sorocabana de Brasil, donde no me salieron bien las cosas. Era la primera vez que salía del país, extrañaba mucho a mi familia.Ç

-¿Llegaste a jugar en Sorocabana?
. Jugué la Liga Sub 22, y el torneo paulista. De ahí me volví a Ecuador, estuve un tiempo entrenándome en Piratas de los Lagos, porque su dueño siempre quiso que jugara para ellos. Cárdenas me quiso llevar a una Universidad de Estados Unidos, pero yo le dije que mi sueño era jugar en Argentina.

-¿Cómo llegaste a Quimsa?
. Bueno, no lo tengo del todo claro, pero en Ecuador hay un entrenador argentino hace mucho, que se llama Lucas Gil, y creo que él tuvo algo que ver, porque mi actual representante es también el suyo, Gustavo Miravet. Surgió entonces la oportunidad. Yo no sabía que iba a darse la chance en Quimsa, porque algo sabía del baloncesto argentino. 

-¿En Ecuador mirabas básquet argentino, de la NBA o de Europa?
. Sí, sobre todo NBA y España. De acá conocía a Quimsa, porque ya hubo un ecuatoriano hace dos años en el club, Joe Quiñones, en la Liga de Desarrollo. 

- Si yo mal no recuerdo, el año pasado vos pesabas unos cuantos kilos menos que ahora. Eras un palito. 
. Sí, pesaba 11 o 12 kilos menos. 

-¿Y cómo creciste tanto?
. En el gimnasio. Iba todos los días. Yo me siento igual, pero noto que he evolucionado, pero es por el gimnasio y las proteínas. 

-¿Cuánto medís y pesás realmente hoy?
. Hoy estoy en 2.15 y peso 109 kilos. 

-¿Qué sensaciones tenés al haber tenido esta oportunidad de jugar y haber causado furor a partir de que casi nadie te tenía visto? Por tu tamaño, tu proyección. ¿Pensabas que se te podía dar tan rápido en un club que tiene tantos jugadores y donde no es simple ganarse los minutos?
. La verdad no pensé que iba a ser así. En el momento que me dijeron que iba a ser el segundo pivote del equipo no me lo creí. En un club como Quimsa, encima. Yo estoy muy agradecido con todo lo que me está pasando. Con el entrenador, por la oportunidad que me está dando. Sé que esto es obra de Dios. 

-¿Qué es lo que más te está costando?
. Lo que más me cuesta es quizá enfrentarme a jugadores mayores, con más experiencia, que me juegan fuerte. A veces pierdo la cabeza. Tengo mucha inmadurez todavía. Tengo que progresar en eso. Después, con mis compañeros me llevo bien.

- Ofensivamente te falta todavía. 
. Sí, mucho. Me falta mucha técnica y tengo que también ganar mucha masa muscular. 

-¿Hay algún jugador que mires desde joven al que tengas como espejo de lo que querés llegar a ser, por tu físico y estilo?
. A mí me encanta Giannis Antetokounmpo. Pero él tiene muy buen manejo del balón. A mí me falta. Cuando practico solo me salen algunas cosas, pero cuando estoy con gente me da nervios. También he mirado mucho los movimientos de Justin Williams cuando jugaba aquí en la Liga. Algunos me dicen que tengo cosas parecidas a él. 

- Bueno, pero si empezaste con casi 18, es lógico que todavía no tengas técnica individual. 
. Sí, claro. Incluso, en Ecuador, nunca tuve una preparación como la que estoy teniendo en Argentina. Hace un año entero que me dicen cómo tengo que hacer las cosas. En Ecuador por ahí me entrenaba un mes, paraba cuatro, y así. Eso dificultaba todo un poco. Ahora no puedo entrenar tanto con Jorge Caballero. Él me ha enseñado mucho en este tiempo.

-¿Cuánto tiempo más de contrato tenés en Quimsa?
. Mi acuerdo es por tres temporadas. Esta es la segunda. 

-¿Tenés algún plan o sueño para tu carrera para los próximos años?
. Yo quiero seguir trabajando. La verdad es que yo eso se lo dejo a Dios. 

- Mirá que Dios anda con mucho laburo eh. 
. Jaja, yo quiero seguir trabajando día a día. Y luego que vengan los frutos. No tengo nada planeado. Quiero llegar lejos, pero no puedo decir exactamente a dónde. 

- Me dijiste al principio que antes del básquet jugabas al fútbol, ¿en qué puesto?
. Jugué en varias posiciones. De arquero, defensor central y también de delantero. 

- Supongo que de 9 cabeceador.
. Sí, pero se me complicaba. Yo era mucho más flaco y me sacaban fácil. Como arquero, algunos decían que era bueno, pero me costaba agacharme para ir a los tiros por abajo. 

-¿En tu familia hay más gente alta?
. No, son normales. Mi papá mide 1.75, mi mamá 1.70. No tengo nadie en la familia con más altura. 

- Yo no recuerdo a alguien tan alto de Ecuador. 
. No, incluso creo que soy el hombre más alto del país. 

- Voy a un tema importante. ¿Qué pasa si te dicen que te nacionalices argentino?
. Y...a mí me gustaría mucho. Aquí en Argentina me han dado un cariño y una acogida muy grande. Me han hecho sentir uno más. Algo que no sentí cuando jugaba en Ecuador. El apoyo que me dan aquí es muy diferente al que me dan en mi país. 

-¿Te lo surigió alguien?
. No, nadie. Alguna vez me preguntó mi representante. Si se da la oportunidad, me gustaría. ¿A quién no le gustaría tener la chance de jugar en la selección argentina?

- Si tenés la ilusión de jugar un Mundial o un Juego Olímpico, con Ecuador te va a ser difícil. 
. Y sí. Hace poco me escribieron porque decían que iban a jugar en la Americup, pero al final no lo hicieron. 

- Andá pensándolo, porque la posibilidad es muy probable que te llegue. 
. No tengo ni que pensarlo. 

Fabián García / [email protected]
En Twitter: @basquetplus

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