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Obras sorprendió a todos en la previa de la temporada cuando contrató a Peter Dominguez, un entrenador estadounidense que venía de ser asistente en Philadelphia y en la selección de Armenia. Con todo nuevo por conocer, el conductor del Tachero se muestra como una persona curiosa, con muchas ganas de viajar y ser protagonista de la Liga en su primera experiencia como entrenador principal.

-¿Cómo ha sido tu carrera desde la Universidad, jugaste allí?

. Nunca jugué. Jugué en Secundario. Cuando me gradué fui a la Universidad de San Francisco State University. Cuando trabajaba y estudiaba allí, trabajaba para los Warriors. Mientras iba a la escuela.

-¿Qué hacías allí?

. Trabajaba más que nada en la parte de negocios. Trabajaba en las relaciones de medios bajo el mando de Ray Ritter. Y después de cuatro años trabajando con los Warriors, eso me ofreció la oportunidad de ver cómo funciona la NBA. Diferentes departamentos, diferentes secciones. Y sabía que quería entrar en el entrenamiento. Y en ese momento el camino para mucha gente como yo para entrar en el entrenamiento fue a través la sala de video. Así que intenté obtener un montón de trabajos de video alrededor de la NBA.  Pero conseguí trabajo coordinador de video con Russ Turner por dos en la Universidad de California Irvine. En ese momento vivía como dos cuadras de distancia de la instalación de los Clippers. Después de dos años en la universidad, a través de gente que conocía, sabía que los Clippers estaban buscando a un tipo de video. Así que conseguí el trabajo y trabajé seis años en los Clippers. Empecé en la sala de video y trabajé mi camino hacia liderar el sector, después trabajé en el desarrollo de los jugadores.

-¿Cuál es tu relación con Doc Rivers?

. Todo lo que tengo en mi carrera se lo debo a Doc. Él me ha dado todo. Cuando tuve el trabajo con los Clippers, fue él quien me contrató. Fue él quien me hizo crecer. Y después Doc me llevó a Phiadelphia. Ahí es donde empecé a entrenar, todas las oportunidades que he tenido me las ha dado Doc. Por eso es un amigo muy cercano. Es un mentor para mí y es como una figura de padre porque él me ha enseñado mucho en el negocio. Me ha enseñado mucho fuera del negocio también, en la vida. Estoy extremadamente agradecido con ese tipo de persona.

-¿Cuál es el estilo de juego que más te gusta de Doc? ¿Lo tienes en tu equipo o en tu estilo de entrenamiento?

. Jugamos muy similar a la ofensiva y la defensa de las filosofías de Doc. Pero ahora donde es diferente es cuando Doc está trabajando. Tiene jugadores como Joel Embiid, James Harden y Kawhi Leonard. Acá tenemos muy buenos jugadores también, pero no tenemos a Joel Embiid, así que tengo que cambiarlo un poco. Es similar porque al final del día estoy tratando de jugar en el estilo NBA, pero en la liga es muy difícil jugar ese estilo, entonces, tengo que dar un poco y hacer algunas cosas que quizás no estoy acostumbrado a hacer, pero es un buen balance. Todo lo que está haciendo fuera del campo, en términos de él como líder, cómo maneja el vestuario, cómo trabaja con su equipo, todo lo que hago es una imagen de lo que hace, porque creo que además de ser un entrenador, creo que no hay nadie mejor en el mundo que él como líder

-¿Cómo adaptas tu estilo a un equipo que le falta altura como Obras?

. Es un desafío, pero tenemos diferentes estilos que podemos jugar siempre. Tenemos diferentes estilos que podemos jugar siempre. Entonces, si tenemos que jugar con jugadores más grandes podemos hacerlo. Ahora mismo, personalmente, no tenemos muchos grandes en el equipo, así que tenemos que jugar un estilo más pequeño. Pero creo que tenés que trabajar con lo que tenés. Hay una frase en Estados Unidos que dice, si tienes limones, has limonada. Entonces, quizás no tengo muchos grandes ahora mismo, pero tengo un montón de muy buenos guardias. Tengo a Pepo Barral, a Felipe Inyaco, a Juampi Venegas, a Andre Spight, tenemos un montón de talento en la posición de guardia. Creo que solo necesito jugar en ofensiva orientado a la guardia, y luego ajustar. Al no tener mucha profundidad en la posición de pivote, tengo que pedir cosas a algunos de mis jugadores que no están acostumbrados a hacer. Así que no siempre tenemos un centro clásico para girar y poner presión en la espalda, así que eso significa que tenemos que tener a todos a presionar. Todos tienen que hacerlo porque tenemos que poner presión en la espalda. Va a tomar tiempo los chicos aprender cómo jugar con los demás en un nuevo sistema. Todossaben cómo juega Pepo, todos saben cómo juega Juan Pablo, pero una vez que los pongas en un nuevo sistema, todavía hay una curva de aprendizaje para descubrir, eso es lo que estamos pasando.

-¿Cuán importante fue el viaje a Bahamas?

. Cuando fuimos a Bahamas, tuvimos un grupo de algunos de los chicos que están en el equipo ahora, pero tuvimos muchos de los chicos que están jugando con nuestra Liga de Desarrollo. Y fue una gran oportunidad para mí conocer a todos los jugadores, trabajar con ellos, ver qué pueden hacer, ver lo que son buenos. Una cosa que ha sido muy evidente para mí cuando vine a Argentina es que es obvio que han recibido muy buen entrenamiento. La calidad de entrenamiento que han tenido en Obras me ha impresionado. Saben cómo jugar con el balón, saben cómo jugar sin el balón, entienden los principios defensivos. Así que ha sido muy fácil transitarme de donde vine a enseñarles, porque ya están a un nivel alto. Bahamas fue genial,  nos permitió experimentar con algunas cosas, ver lo que algunos chicos pueden hacer fuera de su zona de confort.

-¿Cómo es que te dio la oportunidad de venir a Obras? Porque es tu primera experiencia como entrenador.

. Pablo Prigioni, a quien considero otro mentor y un muy buen amigo me hizo saber que existía la oportunidad de venir a Argentina. Argentina, no solo en básquet sino en todos los deportes, es siempre un lugar al que me encantaba venir a trabajar y tener la oportunidad de vivir en Buenos Aires es algo a lo que creo que nadie debería decir nunca que no. Es una experiencia de vida y profesional increíble. Cuando me enteré de la oportunidad hice todo lo que pude para que se diera y estoy muy feliz de estar acá.

- También sos asistente en la Selección de Armenia, ¿cómo es esa experiencia?

. Trabajo a las órdenes de un caballero llamado Rex Kalamian. Rex es un mentor y también es amigo mío. Es uno de los mejores entrenadores de baloncesto que conozco. Trabajé con él unos años en Los Ángeles y me dio la oportunidad de trabajar con él como asistente en la selección. Tener la oportunidad de ir a Armenia, trabajar con el equipo y aprender un poco sobre su cultura ha sido increíble, el pueblo armenio es increíble. Hay una gran comunidad armenia en Buenos Aires, son gente increíble, realmente resistente y perseverantes. Son luchadores, y esas características se reflejaron en el equipo que teníamos cuando ganamos el Eurobasket para países pequeños. Así que es una experiencia increíble. También tuve la suerte de traer a Andre (Spight) a Obras. Rex ha hecho un buen trabajo haciéndolo crecer. La selección de Armenia tiene un futuro brillante y espero seguir trabajando con ellos todo el tiempo que me necesiten.

- Se nota que no solamente pensás en el deporte, sino también la parte cultural, ¿Te fijás mucho en eso al aceptar estos trabajos?

. Me apasiona el básquet y viajar, así que siempre que tengo la oportunidad de combinar las dos, es una experiencia increíble. Tuve mucha suerte en mi vida profesional, el básquet me ha llevado por todo el mundo y me ha permitido conocer lugares preciosos. Creo también que la forma de mejorar como entrenador es aprendiendo y estudiando, pero todo va unido a lo que hacés profesionalmente. Tener un buen equilibrio entre la vida laboral y personal, tener intereses fuera del baloncesto, crecer como ser humano, salir de mi zona de confort, que es Estados Unidos, y venir aquí, en última instancia, no sólo me hará mejor como entrenador de baloncesto, sino mejor como persona. Y en eso consiste la vida, en crecer y mejorar.

- Volviendo a la NBA, al haber trabajado en desarrollo de jugadores y en franquicias como los Clippers y los Sixers, ¿cómo es trabajar con estrellas como Joel Embiid o Kawhi Leonard?

. Tuve la oportunidad de trabajar con tipos como Joel, Kawhi Leonard, Chris Paul, Blake Griffin, Paul George, James Harden, algunos talentos realmente increíbles. Una cosa que siempre me llamó la atención fueron los chicos que acabo de enumerar, todos los años son candidatos al All-Star, al MVP y al primer equipo de la NBA. Y no es una coincidencia porque esos chicos son los que trabajan más duro. Esos chicos pasan más tiempo en el gimnasio. Y no es sólo la cantidad de tiempo que pasan en el gimnasio, sino cómo trabajan. Tienen un enfoque muy profesional, no pierden el tiempo cuando entrenan y tienen a su alrededor gente que los ayuda a crecer y superarse. Esa profesionalidad es lo que espero traer a Argentina y transmitir a nuestros chicos. Creo que el básquet puede llevar a algunos de nuestros chicos tan lejos como ellos quieran. Así que ver y aprender de algunos de los mejores del mundo y ver lo que se necesita para llegar a ese nivel, esa fue la mayor experiencia para mí trabajando con esos chicos.

-¿Qué fue lo que más te impresionó de Obras desde que llegaste?

. Lo que más me impresionó es el buen grupo que tenemos. Todos se llevan bien y tenemos una gran química en la cancha y en el vestuario. La temporada es larga, hay altibajos, no siempre vas a jugar bien, pero el espíritu y la energía han sido increíbles. Eso hace que sea agradable ir a trabajar todos los días con ellos. El club es precioso, cuando tienes tantos equipos jóvenes tanto en chicos como en chicas, tanta gente alrededor trabajando y mejorando bajo el mismo techo, se crea un ambiente muy positivo para aprender y mejorar. Tenemos muchos entrenadores muy buenos, gente con la que disfruto trabajando y de la que aprendo. El hecho de contar con la plataforma que tenemos es algo que realmente me ha impresionado y ha sido muy divertido ser parte.

-¿Estás participando del proyecto general con inferiores?

. Tengo relación con todos los entrenadores. Ahora fichamos a un Manager (Juan Gutiérrez) que va a ser fantástico. El siguiente paso es que podamos llevar todo al siguiente nivel. Lo que me gustaría es reunir a todos los equipos bajo la misma idea de juego y tener ciertos objetivos y filosofías comunes en cuanto a la forma de desarrollar a nuestros jugadores.

-¿Qué te gusta del básquet argentino?

. Lo que me gusta, y también que odio (risas), es jugar contra los entrenadores argentinos. Tienen tantas acciones, tantas jugadas diferentes y opciones que prepararse para eso como entrenador es realmente difícil. Pero como espectador es realmente bonito de ver porque el balón cambia de lado con facilidad y rapidez. Todos saben jugar con el balón y saben jugar sin el balón. Siempre hay mucho movimiento. Es un baloncesto realmente agradable de ver. Ahora, jugar contra él, es realmente difícil.

-¿Cuál es el objetivo de esta temporada?

. Creo que queremos ir paso a paso. Obviamente, es un gran cambio para mí. Creo que también es un gran cambio para los jugadores. Por eso creo que tenemos que ver las cosas a corto plazo, día a día. En última instancia, creo que sólo queremos crecer día a día. En definitiva, queremos competir y ganar todo lo que podamos. Pero eso va a llevar tiempo y va a requerir mucha planificación y mucho trabajo. Y ahora mismo no podemos mirar a mayo o a junio. Tenemos que mirar a noviembre en las próximas semanas.

- Por último, me gustaría saber tu opinión sobre Pablo Prigioni como entrenador y asistente en la NBA.

. Pablo es uno de esos tipos que es un completo genio cuando se trata de baloncesto. Lo que fue capaz de hacer como jugador habla por sí mismo y creo que ahora lo que está haciendo en su carrera como entrenador. Cuando trabajé con Pablo en los Clippers aún era un jugador, creo que está creciendo como entrenador y el cielo es el límite para él. Una cosa que sé es que no ha habido muchos en la NBA muchos entrenadores latinos y creo que Pablo tiene la oportunidad de romper esa barrera y ser alguien que lidere una nueva generación de entrenadores latinos porque se lo que es capaz de hacer, no sólo en términos de su sistema ofensivo o su sistema defensivo y sus filosofías, sino cómo se relaciona con los jugadores, cómo es capaz de sacar lo mejor de los jugadores, cómo es capaz de desarrollar a los jugadores jóvenes, es uno de los mejores del mundo en eso y creo que tiene un futuro muy, muy brillante como entrenador principal en cualquier nivel del mundo. Soy un gran admirador de Pablo y creo que la gente que lo conoce sabe que lo mejor de él es que es incluso mejor persona que entrenador o jugador. Es un ser humano increíble y alguien a quien tengo la suerte de llamar amigo.

Alejandro Malky / [email protected]
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