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De tan trillado pierde fuerza, pero la serie entre Boston (4) contra los Nets (0), es uno de los mejores ejemplos de la historia de la diferencia que existe entre un equipo (Celtics) y otro (Brooklyn), solo compuesto por (irregulares) individualidades. Como bien dice la Ley de Murphy, todo lo que pudo salir mal en Brooklyn salió mal y por eso el final fue previsible. 

Boston volvió a jugar de manera sólida los primeros tres cuartos y medio, consolidando una defensa que incomodó a Kevin Durant (aunque haya anotado 39 puntos, tomó 31 tiros), también a Irving (20, con 6/13), pero por sobre todas las cosas, hizo que los Nets tuvieran que ejercer un enorme desgaste para anotar. Todo les fue difícil, cuesta arriba, y demasiado concentrado en 3 jugadores (KD, Kyrie y Curry). 

Boston fue lo contrario, primero porque si bien también tuvo a su estrella central (Tatum), no dependió nunca de él. Tatum fue la consecuencia de un sistema de juego colectivo donde todos tienen mucha importancia. Él es el que pone el último clavo, pero cuando no está, otros lo hacen. Hoy anotó 29, pero se fue por faltas cuando el partido se complicó en los 3 minutos finales, y nada cambió del todo. 

Marcus Smart se puso el traje de Comodín que tan bien le calza, Horford se esforzó el doble, Grant Williams tuvo su par de apariciones clave, Jaylen Brown lideró a la maquinaria y el resultado fue un final lógico. Como lo es el básquet bien jugado. Los Nets tendrán mucho trabajo en el receso para ver cómo acomodan la nave para la 2022/23. El experimento con el tridente Durant-Harden-Irving terminó saliendo mal, pero no todo es culpa de Marks. La pandemia y la decisión de no vacunarse de Irving fueron absolutamente decisivas. 

Boston, por su parte, está en el mejor momento del año en su más alto nivel. Por eso y por cómo está el resto, hoy es el principal favorito al anillo a nuestro juicio. Esperará seguramente a Milwaukee, que está 3-1 ante Chicago y esquivó a los Nets en primera ronda. Duelazo para ir definiendo al finalista de la Conferencia, que volvió a ser la de sus grandes épocas. 

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