NBA

El calvario que vivió Lonnie Walker IV en su niñez

20:22 10/12/2021 | El jugador de San Antonio Spurs tuvo una infancia dura hasta llegar a la NBA, donde hizo un cambio durante la pandemia que representó esos momentos.

El look de Lonnie Walker en sus primeros momentos en la NBA (Foto: Getty)

Lonnie Walker debutó en la NBA de la mano de San Antonio Spurs y actualmente es apadrinado por Manu Ginóbili en su desarrollo, a quien el jugador le dedicó grandes elogios. En su primer año, el escolta que dirige Gregg Popovich llevaba un corte de pelo llamativo, con rastas todas paradas. Sin embargo, durante la pandemia el jugador se cortó definitivamente y quedó pelado.

A partir de la llamativa decisión, el propio jugador contó las razones de su elección: “La verdad de por qué empecé a llevar así el pelo a principios de quinto grado (10-11 años) porque para mí era como un dispositivo de camuflaje”.

En la misma línea, Walker ahondó en los detalles: “Durante el verano de quinto grado tuve a más familiares a mi alrededor. No voy a dar nombres. Fui sexualmente acosado, violado, e incluso me acostumbré a ello porque a esa edad no sabes muy bien lo que son las cosas. Yo era un chico crédulo y curioso que no conocía el mundo real. Yo tenía la mentalidad de que mi pelo era algo que yo podía controlar. Mi pelo era algo que yo podía crear. Era mío y me daba confianza”.

A la vez, el escolta de San Antonio comentó que la pandemia lo ayudó a crecer: “No he estado muy bien últimamente, esta historia volvía de forma recurrente a mi cabeza y era muy duro. Demonios. A causa del virus empecé a mirarme realmente al espejo y ver quién era en realidad”.

Para cerrar, Walker contó que la decisión le cambió la forma de pensar: “En resumen, he encontrado paz y felicidad interior a través de este viaje. He perdonado a todo el mundo, incluso a las personas que no lo merecen. ¿Por qué? Porque es un peso muerto. El tiempo no espera, ¿por qué lo voy a malgastar con esto? Cortarme el pelo ha sido mucho más que un simple corte de pelo. Mi pelo era una máscara que me protegía de mis inseguridades, para las cuales sentía que el mundo no estaba preparado. Pero ahora estoy mejor que nunca. Adiós a mi viejo yo, hola al nuevo. He cambiado de piel mentalmente, emocionalmente, físicamente y espiritualmente”.

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