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Tanto Pacers como Thunder, equipos que alguna vez apostaron todo por Paul George, ahora brillan sin él. Paradójicamente, los traspasos que buscaban rehacer sus plantillas tras su salida resultaron ser la clave de su éxito actual. Indiana fortaleció su rotación con jóvenes prometedores y una estrella como Haliburton, mientras que Oklahoma City armó un proyecto sostenible con Gilgeous-Alexander al frente. Aunque George no logró llevar a ninguno de estos equipos a la cima durante su tiempo en ellos, su legado como pieza de cambio los ha llevado a disputar las Finales de la NBA 2025.

El traspaso de George de Indiana a Oklahoma City fue clave para construir la actual plantilla de los Pacers. A cambio de su estrella, Indiana recibió a Victor Oladipo y Domantas Sabonis, quienes se convirtieron en pilares del equipo en su momento. Posteriormente, nuevas transacciones con esos jugadores permitieron adquirir a Caris LeVert, Tyrese Haliburton y selecciones del draft que resultaron en talentos como Andrew Nembhard y Ben Sheppard. 

Por otro lado, el paso de George por Oklahoma City también generó una transformación profunda. Cuando fue traspasado a los Clippers para unirse a Kawhi Leonard, el Thunder recibió a Shai Gilgeous-Alexander, Danilo Gallinari y una histórica cantidad de selecciones de primera ronda. Gilgeous-Alexander evolucionó hasta convertirse en MVP de la liga, y el equipo aprovechó esas elecciones para sumar a figuras emergentes como Jalen Williams.