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Hace 25 años, cuando aún no estaba el auge de las redes sociales, The Last Shot se hizo viral. Claro, fue el tiro icónico de Michael Jordan que le dio el sexto anillo a Chicago y que lo depositó en la historia hasta por la épica de ser la última anotación de su paso inmortal por los Bulls.

“No tenía intención de pasar el balón bajo ninguna circunstancia. Ví que había robado la pelota y era mi oportunidad de ganar o perder el juego. Habría hecho ese tiro con cinco personas encima. Me detuve y lancé un tiro en suspensión fácil” expresó Su Majestad en 2018.

Y esa simpleza pareció darle una épica definitiva a un tiro que sería su último hasta la vuelta en Washington. Después de una enorme temporada, con MVP y el hecho de que era el último juego de Phil Jackson y la dinastía Bulls, Jordan robó la pelota a Karl Malone en la pintura defensiva y corrió al contragolpe. Allí, en los últimos segundos decidió atacar a Bryon Russell, solo un obstáculo para la historia. Hizo una finta larga y se plantó al a altura del tiro libre para ejecutar el tiro y enmudecer a todo Utah, ante miles de personas que quedaron inmortalizadas en esa imagen final.

Ese tiro fue el 87 a 86 definitorio y el sexto anillo para las manos de un MJ que anunció al poco tiempo su segundo retiro de la actividad. Un tiro que quedó en la historia y será cada vez más épico.