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Muchas veces suele decidirse que los jugadores son moneda de cambio y si bien no es lindo denominarlo de esa manera, en ocasiones suele sentirse que se los trata así. En los últimos días, en el mercado de la NBA, se dio el traspaso de Damian Lillard a Milwaukee Bucks y desde ahí, como en efecto cascada, fueron varios los jugadores que cambiaron de equipo. Uno de los afectados fue Jrue Holiday, quien salió del equipo liderado por Giannis Antetokounmpo para que pueda llegar el perimetral proveniente de Portland Trail Blazers.

Finalmente Jrue terminó en Boston Celtics y en dicha franquicia afrontará la temporada 23/24. Lauren, esposa de Holiday, fue jugadora de fútbol profesional y ganó la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos con la Selección de Estados Unidos. Tras concretarse el fichaje de su marido, dejó un mensaje importante en sus redes sociales.

Lauren habló en su interesante mensajes sobre el impacto que el traspaso tuvo para su familia, quienes tenían una profunda conexión con la ciudad de Milwaukee. "No hubo aviso, ninguna alerta, ni siquiera una conversación sobre que esa posibilidad existía. Simplemente, está hecho. Ahora a pasar página porque 'no es personal, son negocios’”.

"No comparto esto para decir que tenemos derecho a algo. Comparto esto para decir que somos seres humanos cuyos hijos desarrollan amistades con otros niños en nuestra comunidad, somos personas que valoran la familia y las amistades e invertimos en las ciudades en las que jugamos”, agregó Holiday.

Luego continuó: ”Así que sí, esto va más allá de los negocios. No porque nos sintamos ofendidos, sino porque somos personas, somos humanos, tenemos relaciones, sueños y una conexión con el lugar donde jugamos”.

Lauren no ocultó su entusiasmo por el próximo destino de su familia en Boston, aunque mantuvo que le gustaría que el aspecto comercial de los intercambios se manejara de manera diferente. Cerró expresando: ”Imagina un mundo donde no nos ocultáramos detrás de los negocios, donde no nos tratáramos como mercancías, sino que nos viéramos como piezas valiosas de una comunidad humana destinada a servirnos mutuamente de diversas formas”.

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