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Si Zion Williamson está buscando acallar a los escépticos, su apariencia a solo unos meses del inicio de la temporada 2023-24 de la NBA debería poner en marcha ese proceso. En una imagen que surgió recientemente, Williamson, quien ha estado en el centro de atención durante toda la temporada baja debido a algunos dramas fuera de la cancha, así como por rumores de que podría estar involucrado en varios traspasos, parece haber pasado mucho tiempo en el gimnasio.

Zion. Scary hours. pic.twitter.com/zZEI9gnG5q

— NBACentral (@TheDunkCentral) August 18, 2023

Lo que sea que el joven de 23 años haya hecho en su entrenamiento este verano parece haberlo ayudado a lucir en excelente forma y listo para causar un impacto, al menos para despejar las preocupaciones sobre su peso. Williamson ciertamente parece estar en camino de comenzar la nueva temporada en una forma impresionante. Sin embargo, la pregunta obvia que persiste es si la antigua estrella de Duke podrá mantenerse saludable, lo cual ha sido su desafío hasta el momento en su temprana carrera en la NBA. A lo largo de sus primeras cuatro temporadas, Zion ha jugado en tan solo 114 partidos.

De todos esos partidos ya disputados, Williamson se perdió una temporada completa (2021-22) y jugó 24 partidos (su año de novato en 2019-20), además de 29 la temporada pasada. El mayor tiempo que ha logrado permanecer en la cancha en un solo año fue en 2020-21, cuando el ex número 1 del draft jugó 61 partidos y promedió 33.2 minutos por juego siendo su temporada de All-Star

No sorprende que la mejor temporada estadísticamente de Williamson haya sido en 2020-21, cuando promedió 27 puntos, 7.2 rebotes y un 61.1% de efectividad en tiros de campo. Vale la pena señalar que siempre que ha podido jugar, su tremendo potencial ha sido evidente, ya que ha promediado 22.5 puntos o más en cada temporada, junto con siete o más rebotes en cada uno de los últimos dos años en los que jugó. Luego de poner a New Orleans en el primer lugar del Oeste en diciembre pasado, Zion deberá probar su potencial de jugador superestrella estando consistentemente en la cancha.