Informe Especial

Kobe y el traspaso frustrado a Detroit que pudo cambiar para siempre la NBA

17:08 02/03/2021 | Sucedió en el 2007, en uno de los momentos de máxima fricción entre los Lakers y Bryant. El escolta decidió no marcharse gracias a una insólita cláusula.

Bryant pudo marcharse (Foto: Basketball Network)

¿Qué hubiera pasado si...? La vida da muchas vueltas y en cada cruce hay una pregunta. Las respuestas son pocas, al menos en comparación con los interrogantes. ¿Qué hubiera pasado si...? Imposible saberlo, pero esos pensamientos muchas veces surgen y las almohadas en la noche cargan con el peso de los mismos. 

Una de esas conjeturas se dio en el 2007, cuando los Lakers y Kobe Bryant casi se separaron por siempre y para siempre. Atrás habían quedado los tres anillos con Shaquille O´Neal, los años de gloria y la esperanza de que la plantación vuelva a ser productiva. Nada parecía solucionarlo y cualquier detalle erosionaba un poco más el volcán californiano.

Los Pistons eran el tercero en discordia y tanto ellos como los Lakers habían aceptado un traspaso que cambiaría desde la raíz los cimientos de la NBA. A pesar de eso, el único problema era que Kobe tenía una cláusula de no canje (¡era el único jugador de la liga que tenía ese privilegio en ese momento!) y Detroit no era un equipo muy de su agrado. De hecho, los de la Ciudad del Motor le ganaron a Los Ángeles la final tres años antes...

Los Lakers recibirían a Richard Hamilton, Tayshaun Prince y algunos picks, pero fue Jerry Buss otra vez el que convenció a Bryant de que su destino siempre fue Los Ángeles. Si Kobe hubiera firmado el intercambio, el trío estelar estaría conformado por él, Chauncey Billups y Rasheed Wallace, dos de los mejores jugadores del momento. 

Mientras tanto, los Lakers habrían alineado a un equipo encabezado por Richard Hamilton, Tayshaun Prince, Lamar Odom, Andrew Bynum y Derek Fisher. ¿Nada mal no? Pero sin ningún incentivo para cambiar su variedad de picks y jugadores jóvenes por Pau Gasol, los angelinos nunca se hubieran reconstruido ni ganado el título de la NBA tanto en 2009 como en 2010.

Afortunadamente para los fanáticos de los Lakers, Bryant se mantuvo en su casa hasta su último partido en la NBA, cuando levantó un micrófono y aguantándose las lágrimas esbozó un decidido: "Mamba out".  

 

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
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