Manu HoF

El modo killer de Manu se fue invicto de la NBA

22:25 03/04/2022 | El bahiense es reconocido en su carrera por ser un jugador colectivo, siempre primero el equipo. Sin embargo hubo ocasiones en que lo necesitaron para anotar y esas noches San Antonio no perdió

Manu Ginóbili y una postal de noche caliente ante Phoenix metiendo 48 puntos (Foto: getty)

El respeto que tiene Manu Ginóbili por el juego es lo que lo hace distinto a todos, su manera de competir, la fiereza y el ponderar lo colectivo por sobre lo individual rompió definitivamente el molde en el mundo NBA. Un jugador que tenía todo para ser estrella, ganar más dinero y no lo hizo, para poder competir más y mejor es digno de admirar.

San Antonio en el tiempo que estuvo Manu fue un equipo contendiente en el Oeste, siempre entre los primeros con muchos más triunfos que derrotas y en el goleo se destacaban Tim Duncan y Tony Parker como primeras opciones, pero Ginóbili siempre aportaba algo.

Ese “algo”, en seis ocasiones se transformó en un montón y hubo seis noches en las que Manu sintió el balón como nunca en la ofensiva y casi todas pasaron por sus manos, por su zurda mágica. A lo largo de su carrera, si le quedaba algún motivo más para jactarse, puede presumir que nunca cuando metió 40 puntos o más, su equipo perdió.

Hay una frase en el baloncesto que dice que si metiste tanta cantidad de puntos y tu equipo perdió, no sirve de mucho, aunque a veces si sirva para otros factores como la confianza. Pero esto a Manu no le faltó nunca y por eso que meter puntos nunca fue su objetivo, sino que lo importante era que el equipo gane.

Repasando los seis encuentros con 40 puntos o más, tenemos el máximo de 48 ante Phoenix, un 21 de enero del 2005 donde los Spurs ganaron 128-123 en tiempo extra. Ese mismo año, la temporada en la que iban a terminar siendo campeones de la NBA, ante del cierre de la fase regular le propinó 40 a los Clippers en la victoria por la mínima por 125 a 124.

En otro año de los Spurs campeones, Ginóbili metió 40 puntos a los Hawks en el triunfo 103 a 96 en Georgia. Luego, en la campaña siguiente, y transformándose en una pesadilla para los Cavaliers, metió 46 puntos, además de 8 asistencias,  en un duelo individual, casi estelar contra LeBron James, quien sumó 39 tantos, pero no pudo evitar la caída de su equipo por 112 a 105. Ocho días más tarde de la proeza en Ohio, el surgido en Bahiense del Norte continúo con la mano caliente y en Minnesota metió 44 puntos en 38 minutos, en el éxito por la mínima ante los Wolves 100 a 99.

Para cerrar este sexteto de actuaciones individuales memorables de Emanuel, en San Antonio (la única que tuvo en su cancha) le metió 43 a Orlando en 35 minutos en un triunfo tranquilo por 112 a 100.

Anotar y ganar, una combinación que no le mueve la aguja a Ginóbili, pero si se da bienvenido sea en pos de construir y darle algo positivo al equipo. Meter 40 puntos que sirvan para la victoria, otro ítem inmaculado que se lleva Manu de su paso histórico por la NBA.

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