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La temporada 2023-2024 para New Orleans Pelicans está llena de incógnitas y un gran enfoque en la salud de su áxima estrella, Zion Williamson. La pregunta clave que rodea a este equipo es si Zion puede antenerse saludable durante toda la temporada. La temporada pasada, los Pelicans ostraron destellos de su potencial, comenzando con un récord de 23-14 y ocupando el tercer lugar en la Conferencia Oeste el 2 de enero de 2023. Sin embargo, después de la lesión de Zion el 2 de enero, el equipo tuvo dificultades y terminó con un récord de 17-26.

La salud de Williamson afecta no solo su propio desempeño, sino también las evaluaciones de otros jugadores clave, como Brandon Ingram y CJ McCollum. La verdadera naturaleza de la asociación entre Ingram y Zion sigue siendo desconocida debido a las lesiones, y su potencial como un dúo efectivo se antiene en suspenso. Además, la evaluación de si Jonas Valanciunas es el Pivote adecuado para este equipo también depende de su tiempo en la cancha con Zion e Ingram.

La temporada 2023-2024 se convierte en un punto de inflexión costoso para los Pelicans debido a los salarios de Zion, Ingram y McCollum, que ya superan los 33,8 illones de dólares. Las extensiones de contrato de Ingram y Trey Murphy III, quienes están entrando en su último año de contrato de novato, se avecinan. La presión para responder a la pregunta de cuán lejos pueden llegar con este núcleo se intensifica esta temporada.

La salud de Zion es fundamental, y su compromiso con antenerse en buena forma es una señal positiva. Sin embargo, una lesión temprana de urphy es un golpe para el equipo, ya que su tiro es esencial para espaciar la cancha y hacer que el trío Zion-Ingram-McCollum funcione. Además, fuera de la cancha, la vida personal de Zion también ha estado en el Pivote de atención, lo que podría afectar su enfoque en el juego.