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En el terreno de las suposiciones y tratando de enaltecer lo realizado y bajarle un poco el precio a la imbatibilidad de Michael Jordan en las finales, Vernon Maxwell se metió en una contienda difícil de sostener, más que no sea por los números fríos y sostenido por ese terreno intangible de que hubiera sido si pasaba tal cosa.

Los Rockets fueron los que se entrometieron entre la dinastía de los Bulls en la década del 90, obteniendo los campeonatos del 94 y 95 con el asterisco de que en el primero Jordan estaba jugando al béisbol y para el segundo Su Majestad volvió, pero no le dio tiempo para ponerse a punto y el Magic de Shaq y Penny lo privaron de luchar por una final. Con este punto de que MJ no estaba, los Rockets poco tienen que ver, ellos hicieron su trabajo y se quedaron con los dos trofeos.

Vernon Maxwell expresó que en una hipotética final entre los Bulls y los Rockets, Houston tenía las de ganar por los antecedentes en partidos entre sí, algo para tener en cuenta, pero que para nada esgrime una lógica para unos playoffs o finales.

“Hombre, solíamos vencerlos todo el tiempo. Sé que las cosas son diferentes durante los playoffs, pero éramos capaces de hacerlo. Solo mira los números, ellos no mienten, les estábamos dando una paliza a esos muchachos. Quiero decir que nos les ganábamos por 5, los vencíamos por 15, 17, 16, 13. Durante un lapso de ocho años tuvimos 9-1 contra ellos, eso dice algo, hombre”, aseveró Mad Max en diálogo con el Podcast No Chill.

Sin dudas que los Rockets ante los Bulls hubiera sido una gran final de ver, sobre todo a mediados de los 90 o mismo cuando Houston llegó a las finales. A pesar de los números que marcó Maxwell, su equipo no fue capaz de llegar a la definición en las seis ocasiones que sí lo hizo Chicago y no hay nada más concreto que eso.

Para poder asegurar eso, tendrías que haberte enfrentado a MJ en las finales y ver de qué estás hecho y eso no ocurrió. Sabías donde encontrar a Jordan y sus Bulls, pero no llegaste a la cita, por lo que su teoría carece de cuerpo y solo será un supuesto interrogante para la eternidad.