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Faltan 1:42 minutos para que termine el primer cuarto del partido en el que se enfrentan Denver Nuggets y Minnesota Timberwolves. Nikola Jokic sube la pelota y Gary Harris intenta jugar una acción de mano en mano. El serbio hace una finta y su compañero no toma la naranja, sino que corta al aro y recibe un pase milimétricamente calibrado hacia su pecho. Bandeja y puntos fáciles para el conjunto de Colorado.  

Aquella jugada es el pan de cada día de los Nuggets y Nikola es el sol por el que giran sus compañeros. Partido a partido, el balcánico destila asistencias y es el verdadero base de Denver. Jokic no es una excepción y varios otros están jugando de la misma manera. Los mejores ejemplos son Bam Adebayo, Marc Gasol y Jusuf Nurkic, entre otros.  

De todos ellos, Nikola y Bam se destacan por otra cosa dentro de esa faceta: pueden trasladar el balón como si fueran armadores. Ambos tienen luz verde para subir la pelota desde el sector defensivo hasta el ofensivo y, una vez allí, seleccionan qué hacer depende de las estrategias de sus equipos.  

No es casualidad que ambos sean los pivotes que más asistencias promedian en la 2019/20: 5.4 para Jokic y 5.0 para Adebayo. Y el serbio no solo es el que más pases otorga en la liga. En Denver es el pasador más destacado, con una media de 7.0 por partido. Bam, por su parte, es uno de los tres mejores, de Miami (5.1), solo por debajo de Jimmy Butler (6.0) y empatado con Dragic.  

A su vez, hay dos internos que por conversión podrían entrar en la misma lista. Uno todavía se mantiene en los playoffs y se llama Jeff Green. Su polifuncionalidad está siendo explotada hasta el hartazgo por los Rockets y desde el primer segundo hasta el último ocupa la posición de cinco. Generalmente sube el balón para jugar en pareja con James Harden y en la 2019/20 promedia 0.8 asistencias que no visualizan verdaderamente su impacto como armador.  

El segundo es Draymond Green, quien tampoco es un cinco natural, pero por momentos se ubica en esa posición y, cuando lo hace, no hay nadie mejor que él (6.2 asistencias en la 2019/20). Por sistema, el de Golden State organiza siempre todo el ataque de los Warriors, apoyando la pelota en el piso, poniendo cortinas y ordenando a todos de manera vocal.  

La nueva era llegó hace muchos, pero quienes tienen estos jugadores llevan la modernidad hacia otro nivel. Ya no son solo excelentes pasadores, sino también buenos armadores. ¿Vendrán más de ellos? Pueden estar seguros que sí. Los pueden llamar los Point-Center.