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Fabricio Oberto y su juego más perfecto en la NBA

16:19 07/08/2020 | Ocurrió el ocho de noviembre de 2006. El cordobés anotó 22 puntos y cerró el juego con 11/11 de cancha. Además, los Spurs vencieron a los Suns.

Oberto también totalizó 10 rebotes (Foto: NBA)

El nacido en Las Varillas fue uno de los internos más dominantes en la historia del básquet argentino. Se caracterizaba por su envergadura, sacrificio, defensa y calidad para anotar. En la mayoría de los equipos en los que estuvo fue importante en el apartado ofensivo. Sin embargo, cuando llegó a San Antonio Spurs tuvo que modificar su rol y trascendió gracias a su aporte en los intangibles. Una cortina, un tiro modificado, un box-out. Lo que no se veía, él lo hacía.  

Más allá de todas esas cuestiones, hubo una noche en la que los texanos lo necesitaron para que se encienda en ataque. Jugaban contra Phoenix Suns un duro partido y el cordobés mostró su más perfecta versión, anotando 22 puntos para que los suyos se lleven el triunfo tras un excedido esfuerzo en tiempo suplementario. 

Lo del argentino fue sublime. Entró de titular y cerró el juego con 11/11 en tiros de campo. Por si eso fuera poco, Oberto también consiguió diez rebotes, dos asistencias, un robo y una tapa durante los 39 minutos que estuvo en el rectángulo de juego. Otro nacional que fue importante se llamaba Manu Ginóbili, que arrancó, al igual que Fabricio, en el quinteto inicial y finalizó con 12 puntos, ocho rebotes y cinco asistencias en 32:32 minutos.  

A su vez, Tim Duncan y Tony Parker lideraron en el sector anotador, convirtiendo 29 y 26 puntos cada uno. Phoenix, que en su plantel tenía en cancha a la temerosa dupla formada por Steve Nash y Amar´e Stoudemire, aguantó hasta el suplementario, pero un parcial final de 10-5 en contra les entregó la derrota en bandeja de plata.  

El partido, que se jugó en el AT&T Center de San Antonio, fue notable, y el talento de Oberto también. Un ocho de noviembre de 2006 el país yanqui al fin pudo ser testigo del caudal anotador del cordobés que soñaba desde pequeño con jugar en la NBA.

  

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