NBA 2019/20

NBA: qué es y cómo funciona el mercado de buyouts

22:07 03/03/2020 | Tras el cierre del mercado de traspasos, empieza la vorágine del mercado de buyouts. En Básquet Plus te explicamos en qué consiste.

Thomas fue uno de los jugadores cortados (Foto: The Ringer)

De vez en cuando, por una u otra razón, un jugador y su equipo prefieren tomar caminos separados. Es parte del negocio y sucede normalmente en varios casos. El primero, cuando en un traspaso llegan a un equipo jugadores que no influyen en sus objetivos a corto o largo plazo. Por ejemplo, cuando un jugador veterano es mandado a una franquicia que está buscando aumentar su posición en la lotería del draft. 

Otra opción es cuando un equipo adquiere a un veterano con el objetivo de que mejore el nivel de la plantilla, pero este termina desempeñándose por debajo de lo que se esperaba (véase Anthony, Carmelo). O también cuando un equipo no logra traspasar al jugador que quería antes de la fecha límite. 

¿Qué pasa después? 

Cuando un equipo y un jugador quieren separarse, generalmente empiezan a negociar las condiciones por las cuales se llevará a cabo el buyout. El agente de dicho jugador negocia una porción del contrato necesario para que este sea dejado libre. A veces -las pocas-, este debe ceder todo el dinero restante de su contrato si desea irse. Otras veces, es sólo una porción de él. Cada caso es particular, único y manejado entre franquicia y representante. Cuando el protagonista en cuestión es cortado, se convierte en agente libre sin restricciones y es considerado elegible para firmar con cualquier otro equipo interesado. 

Pero, ¿qué es un waiver? 

Los famosos waivers son unos periodos de 48 horas en el que los equipos tienen permitido reclamar el contrato del jugador, y si lo hacen ese jugador ya no es considerado un agente libre sin restricciones. En cambio, el equipo que lo reclama debe poder ajustar el contrato existente del jugador en su nómina o bajo una excepción no utilizada del límite salarial.  

Cuando el jugador ya es agente libre, ¿qué pasa a continuación? 

Cuando esto ocurre, el resto de su salario se reduce o es eliminado completamente de su antiguo equipo, dependiendo siempre de lo que acordaron previamente con el representante. Hasta aquí todo es fácil, pero es ahora cuando se pone divertida la cosa. Después de esto, el jugador se transforma en agente libre, libre de unirse a cualquier franquicia interesada en disponer de sus servicios. 

La mayoría de los equipos candidatos a disputar los playoffs esta temporada tienen una nómina inundada y ajustada, por lo que lo máximo que pueden ofrecer es el mínimo de veteranos, siempre prorrateado dependiendo del número de días que le queden a la temporada. 

¿Puede un jugador pedir un buyout? 

Sí, pero eso no garantiza que ocurra. Por ejemplo, Jahlil Okafor había pedido un buyout hace algunas temporadas, cuando aún era jugador de Philadelphia Sixers. Sin embargo, la franquicia rechazó su petición porque quería traspasarlo, así no se quedaban con las manos vacías. Finalmente, el pívot fue enviado a Brooklyn Nets y hoy por hoy se encuentra en New Orleans Pelicans. 

¿Qué pasa con el contrato de un jugador con su equipo anterior cuando firman con un equipo nuevo? 

El viejo equipo solo debe pagar al jugador el restante de su antiguo contrato. Por ejemplo, Dwyane Wade fue uno de los buyouts de más alto perfil en la memoria reciente cuando él y Chicago Bulls acordaron separarse cuando el escolta jugaba en aquella franquicia. 

¿Cuánto dura el periodo de buyout? 

Técnicamente, el mercado de buyouts está siempre abierto, pero se acrecienta y es completamente activo una vez que la fecha límite de traspasos llega a su fin. Es ahí cuando los equipos, generalmente candidatos, buscan rellenar su plantilla con jugadores que puedan llegar a darles un salto de calidad. No obstante, el mercado de buyouts finaliza el 1 de marzo, porque es el último día en el que aquellos que fueron cortados pueden encontrar un conjunto nuevo que les permita competir en playoffs. Cabe aclarar que los agentes libres en el mercado de buyouts difieren de los agentes libres regulares que nunca firmaron con un equipo durante o antes de la temporada regular. 

¿Qué frena a un equipo de traspasar a un jugador y después volverlo a fichar luego de que este no haya sido reclamado por ninguna franquicia en las próximas 48 horas, habiéndose convertido en agente libre sin restricciones? 

En la NBA no se les escapa ninguna y esta era una práctica muy usual en el pasado, pero en la actualidad ya no es posible hacerlo. En el 2010, Cleveland Cavaliers traspaso a Zydrunas Ilglauskas a Washington Wizards en un paquete que incluía a Antawn Jamison. Cuando los de la capital cortaron al interno de Lituania, los de Ohio volvieron a ficharlo pasados 30 días. Tras ello, la liga no volvió a permitir este tipo de movimientos y, en el nuevo convenio de acuerdo colectivo (CBA por sus siglas en inglés) prohibieron que los conjuntos contratasen a un jugador traspasado a otro equipo e inmediatamente cortado por ese mismo equipo. 

¿Por qué un equipo realizaría un acuerdo de buyout con un jugador? ¿Cuál es el beneficio para la franquicia? 

A pesar de que la mayoría de los aficionados pensarían que los equipos siempre terminan perdiendo en esta clase de transacciones, hay tres situaciones que terminan siendo positivas para las franquicias. 

Primero, que pueden ahorrar dinero. En vez de pagar el salario completo de un jugador, un equipo y el agente del jugador negocian un número reducido que sea beneficioso para ambos. A veces, como se había explicado, ese monto es cero. Chicago, por ejemplo, ahorró dinero cuando acordó un buyout con Wade hace un par de campañas. 

Segundo, si el jugador no es una pieza que encaje con los planes a futuro del equipo. Aquellas franquicias que buscan aumentar su puesto en la lotería del draft quieren comenzar a proyectar a sus jugadores más jóvenes, y tener a un veterano que preferiría estar en un conjunto candidato al título podría ser un obstáculo para ello. 

Por último que las franquicias, generalmente, no desean retener a un jugador que no quiera estar allí. La mayoría de los veteranos son buenos compañeros de equipo no importa donde estén, pero si alguien verdaderamente quiere estar en un equipo ganador, lo mejor es dejarlo ir, especialmente si no hay deseos de formar una plantilla acorde a sus necesidades en el futuro inmediato. Esta reputación de buena organización expresada por el jugador puede ser útil para ese equipo en futuros fichajes de agentes libres. 

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14

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