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New York atraviesa uno de sus peores temporadas dentro de la NBA. Los Knicks no pueden levantarse en la liga estadounidense, son colistas de la Conferencia Este, arrastran una muy pobre marca de 5-36 y encadenan una racha adversa de dieciséis derrotas al hilo.

El argentino Pablo Prigioni, base del elenco neoyorkino, es uno de los actores que más viene padeciendo esta mala campaña del equipo de Derek Fisher. El cordobés, junto al resto de los Knicks, fue parte del reciente partido de su equipo ante Milwukee Bucks en Londres, parte de los NBA Global Games y en un cotejo donde los de la Gran Manzana sumaron una nueva derrota por 95-79.

En New York ya están pensando en una reestructuración profunda. Independientemente de que se atraviesa por una 2014/15 donde las lesiones son muy frecuentes (como el importante caso de Carmelo Anthony), en los Knicks ya se han hecho varios movimientos deshaciéndose de JR Smith, Sam Dalembert, Imán Shumpert y con los rumores de ahora apuntando hacia José Calderón y Andrea Bargnani.

El pozo y la crisis parecen no tener piso y por eso, aprovechando su estadía en Londres, la agencia EFE dialogó con Prigioni acerca de la actualidad del equipo. Amén de que también se habló de su arribo a la capital británica, acá te dejamos lo más destacado de su entrevista en base al presente de New York.

- Ha jugado más minutos esta temporada, ¿está satisfecho con su rendimiento en esta primera mitad de curso?

. Estoy contento con el trabajo que he hecho, siempre intento dar el máximo, jugar inteligente y ayudar a mis compañeros. A estas alturas de mi carrera no busco el protagonismo que uno puede buscar con 25 o 26 años, me centro más en hacer lo que pueda para ayudar al equipo y a los compañeros. En esa óptima estoy contento. Sin embargo, la temporada está siendo complicadísima por un inicio muy difícil, marcado por las lesiones y los malos resultados.

- Los Knicks, con Phil Jackson como presidente, comenzaron la temporada con muchas expectativas, ¿a qué cree que son achacables los malos resultados?

. Nos llevó mucho tiempo al principio, ya que sufrimos la baja de nuestro base titular (Calderón) todo el primer mes. Luego, otros jugadores importantes fueron sufriendo lesiones. Estábamos también en medio de un sistema de aprendizaje que era nuevo para todos, unido a muchos cambios y traspasos en la plantilla. Todo se ha hecho ahora apuntando a la próxima temporada, y ese conjunto de cosas nos ha llevado a una situación complicada.

- Los Knicks le dieron la oportunidad de dar el salto a la NBA. Ahora, dos temporadas y media después, ¿se plantea salir?

. No, para nada, y menos en una situación así. No creo que sea bueno ni hable bien de un jugador que quiera irse cuando las cosas van mal. Toca aguantar, seguir trabajando, terminar la temporada de la mejor forma posible y ver lo que ocurre en verano.

- ¿Se plantea acabar su carrera en la NBA o otra liga, como la española o la argentina?

. A veces empiezo a pensar y me digo que no tiene sentido que piense nada ahora. Falta mucho tiempo para eso. Cuando tenga que tomar una decisión veré las opciones que hay, y con las cosas claras decidiré. Estoy abierto a cualquier cosa que pueda ocurrir.