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Hace rato que la parte más turbulenta de la 2014/2015 parece haber quedado atrás para los San Antonio Spurs y más allá de lo que puedan o no hacer en los playoffs, el equipo ya está jugando como siempre supo hacerlo y en el camino, demostrando que cuando lo hace, casi no tiene rivales que puedan hacerle frente. Incluso cuando adelante está uno de los máximos candidatos a llevarse el MVP de esta temporada.

Lo que uno podía esperar que fuera un partidazo entre Spurs y Thunder, teniendo en cuenta la mejoría reciente de los de Popovich y que el local se jugaba parte de sus chances de avanzar a playoffs. Sin embargo, el trámite del choque sería uno completamente distinto, con un conjunto texano que fue una aplanadora desde el inicio, brilló en ambos costados y sacó una casi definitiva ventaja de 29 a 10 en los primeros doce minutos.

Como si esto fuera poco, San Antonio no sacó el pie del acelerador y anotando 34 puntos, puso a descansar cualquier intento de reacción de los dirigidos por Brooks. La diferencia al llegar al entretiempo era de 63 a 41 y la historia ya estaba sentenciada hace rato. Los Spurs también ganaron fácil el tercer cuarto (25-16) y de no haber sido por una relajación final, probablemente hubieran repetido los 39 puntos de distancia que hubo entre unos y otros, un par de semanas atrás. El final fue para los visitantes por 113 a 88, aunque lo que se vio en cancha, fue todavía más distante entre los dos equipos.

Quien lució como un MVP en la noche de Oklahoma City fue el más valioso de las pasadas finales, Kawhi Leonard. El alero hizo de todo, terminando con 26 puntos, 3 robos, 1 tapa, 2 rebotes y 2 asistencias en apenas 24 minutos de juego. Además, Tim Duncan (12), Marco Belinelli (12), Aron Baynes (10), Manu Ginóbili (10) y Patty Mills (10) también anotaron en doble dígito para el ganador.

Por el lado de OKC, como siempre el mejor fue Russell Westbrook, aunque con números mucho más modestos que en otras ocasiones: 17 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias. Ningún otro jugador de Brooks superó los 11 puntos, cifra lograda por el joven Jeremy Lamb desde el banco de suplentes.

La victoria de los Spurs tiene dos valores principales: primero el ya mencionado, de confirmar el gran presente del equipo. Pero también uno algo más tangible, como es el crecimiento dentro de las posiciones del Oeste. En realidad, el triunfo no sacó a San Antonio del sexto puesto de la Conferencia, pero sí lo acercó al tercer lugar  incluso al segundo, quedando medio juego por detrás de Memphis (3°) y Clippers (5º) y un partido y medio abajo de Houston (2°), recordando que los de Popovich todavía tienen cuatro compromisos restantes en su calendario de fase regular. Difícil, porque pierde los empates, pero posible.

Manu Ginóbili: 10 puntos, 4 rebotes, 2 asistencias, 1 falta, 1 pérdida, 2-4 en dobles y 2-4 en triples durante 18 minutos de juego.