Basquetplus.com

Justin Williams es uno de esos clásicos jugadores que no tienen que anotar para dominar un partido. El pivote de Olímpico nos lo recordó una vez más ante Libertad, siendo figura con apenas 9 puntos. ¿Qué hizo? Bajó 25 rebotes, dio 7 tapas e intimidó otra buena cantidad de disparos cerca del aro. A continuación, hablamos con Williams sobre las expectativas para esta temporada.

- 25 rebotes, 7 tapas... ¿demostraste por qué sos el MVP?

. No me gusta esa palabra, nunca me gustó. No siento que sea un MVP. No me gusta que me digan así, sino que quiero ser conocido como un jugador de equipo, que rebotea y agarra rebotes. Me gusta ser bajo perfil y quedarme afuera del radar. No me gusta la atención. Supongo que es merecida, pero solamente intento hacer lo que me dice el entrenador: rebotear y dar tapas, para ayudar a mi equipo lo mayor posible.

- ¿Por qué elegiste seguir en Olímpico?

. Este entrenador honestamente saca lo mejor de mi. Saca más de mi, que cualquier otro entrenador desde que juego al básquet profesionalmente. Esa fue la razón principal para quedarme: jugar con él. Sabía que me iba a mejorar como jugador y sacar lo mejor de mi. Aún cuando juego muy bien, siempre me empuja a mejorar. Y eso es exactamente lo que necesito en este momento. Para mi no se trata de las ciudades grandes... sino de mejorar y estar con un entrenador que me va a hacer mejorar.

- ¿Cómo describís a este nuevo Olímpico?

. Es más joven, nuevo... se siente diferente. Es una dinámica distinta este año. Tenemos muchos tiradores, tenemos muchos jóvenes, muchos que precisan entender la ofensiva, incluyéndome a mi. Definitivamente es un equipo distinto. Necesitamos tiempo juntos. Tenemos a la columna vertebral con Maxi, Fede, Coso, Guaita y yo... Boccia ha estado tremendo para nosotros.

- Este año tienen que afrontar dos competencias. ¿Lo toman como una revancha, el hecho de buscar al menos llegar a las finales?

. No miro a la temporada pasada como un fracaso. Llevamos a este club a lugares en los que nunca había estado. No fue un fracaso para nada. Como dije, estamos tratando de construir más éxito que el que tuvimos el año pasado. Definitivamente queremos llegar a las finales, pero por ahora vamos yendo día a día.

- ¿Sentís que lo que pasó el año pasado los puede ayudar en este?

. Estamos más hambrientos este año, nos quedó un sabor salado en la boca. Eso va a jugar: quererlo todavía más. Guaita se me acercó en el entretiempo y me dijo que este año estamos jugando por un campeonato. Eso me ayudó y pienso que podemos usar esa mentalidad en nuestro favor.