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En un partido entre equipos con realidades opuestas en el torneo, se enfrentan Instituto y Olímpico, desde las 21.30 horas en el Angel Sandrín cordobés.

En el caso de Instituto, el equipo de Seigorman no viene de la mejor manera, registrando tres derrotas de forma consecutiva, ante Regatas, Estudiantes y Sionista. Los cordobeses llegaron a tener la mejor defensa del torneo hasta hace un par de semanas, pero han bajado mucho su nivel en ese aspecto: permiten más de 88 puntos durante esa seguidilla de caídas, un número con el que se les hará muy difícil obtener buenos resultados.

El equipo todavía está intentando integrar al experimentado Byron Johnson, quien llegó luego del intento fallido de incorporar a Kenny Adeleke. Johnson ha disputado dos partidos y aunque la idea fue traerlo para alargar la rotación y se una a los esquemas defensivos, se espera más de él: 0 puntos totales y muy pocos minutos en cancha.

Para este encuentro, Instituto tendrá una sola baja: el U23 Lucas González, quien presenta una lesión en el tendón rotuliano, que apenas le ha permitido disputar cinco encuentros durante la presente 2015/2016.

Desde los números, lo mejor de los cordobeses pasa por sus extranjeros: Jaz Cowan la está rompiendo en su vuelta a la Liga con 18,2 puntos y 8,3 rebotes de promedio, mientras que Justin Giddens se destaca con 15,9 tantos y 6,8 tableros. También es muy interesante lo de Alejandro Zilli, quien aporta 13,1 unidades y 7,7 rebotes por juego.

Muy distinta es la realidad de Olímpico de La Banda, uno de los equipos que mejor está jugando en este momento de la temporada. Los de Fernando Duró llegan de una seguidilla perfecta en casa, obteniendo victorias consecutivas ante Sionista, La Unión y Atenas.

Si Instituto basa la mayor cantidad de chances en lo defensivo, Olímpico ha demostrado hasta ahora ser un temible equipo ofensivo. Los santiagueños han anotado por encima de los 80 puntos en todos sus partidos, exceptuando presentaciones ante Libertad y Estudiantes, dos de las mejores defensas del torneo. Además, sus 86,2 tantos de media son la tercera mejor marca de la competencia.

Otro aspecto positivo para Olímpico pasa por la salud. En una etapa complicada en la Liga con el tema lesiones, poder contar con la rotación completa es un lujo que pocos se dan. Los de Duró lo hacen y viajaron a Córdoba con sus 10 jugadores (sin juveniles) a disposición del DT.

Lo importante para el Negro es que ha encontrado muchas variantes y vías de gol en esta campaña. De hecho, cuenta con ocho jugadores distintos promediando por encima de los 7 puntos, una cifra que pocos consiguen a este nivel. Su goleador es Federico Van Lacke con 13,9 puntos, seguido por los 13,2 de O´Louis McCullough, los 12,8 de Mauro Cosolito (clave desde el banco) y los 11,3 de Darren Phillip.

Además del goleo repartido, lo que realmente ha caracterizado a Olímpico hasta ahora es su sensacional eficacia de tres puntos: McCullough, Cosolito, Guaita, Cantarutti, Stanic, Aliende y Crotti promedian por encima del 40% en triples. Tiradores por doquier.

En el otro partido de la jornada, San Martín se vuelve a presentar en Corrientes frente a un Estudiantes de Concordia muy limitado desde el tema físico, pero que viene consiguiendo resultados sorprendentes.

San Martín se presenta en el Gigante Rojinegro por primera vez en noviembre, luego de una seguidilla de tres partidos consecutivos fuera de casa, de la cual volvieron con un saldo de un triunfo y dos derrotas.

A esta altura, está claro que el equipo correntino ha sido la gran decepción de este comienzo de temporada, costándole mucho más de lo esperado acoplar a las nuevas caras del equipo, pero también mantener el nivel de varios de sus jugadores de la Liga pasada.

La primera baja por el mal rendimiento ha sido John De Groat y los de González se presentarán este domingo nuevamente con esa ficha libre. Además, están en duda las participaciones de Matías Lescano y Diego Ciorciari, quienes fueron informados por la dupla arbitral en el último duelo ante Libertad y depende del Tribunal de Disciplina habilitarlos o no.

Los problemas de San Martín son muy claros: defensivos. Los correntinos son el segundo equipo más anotador del torneo (86,5) pero el más flojo en la marca (87,7) por un buen margen. La identidad que había logrado el conjunto en los últimos años ha brillado por su ausencia en esta campaña y es una situación que no han logrado corregir, aún con el correr de los partidos.

En ataque, aún sin De Groat, San Martín tiene mucho para ofrecer. Los nueve jugadores de su rotación promedian por encima de los 6 puntos y seis de ellos lo hacen por arriba de los 8 tantos. Su figura es Jeremiah Wood con 15,5 puntos y 7,1 rebotes, mientras que Miguel Gerlero (11,2) y Mateo Bolivar (10,2) también suman en doble dígito.

El caso de Estudiantes es uno de los más particulares del torneo y del último tiempo. Decir que están viviendo una pesadilla con el tema de las bajas sería hasta quedarse corto, perdiendo a jugadores, tanto nacionales como extranjeros, por todo tipo de motivos.

¿El último en sumarse? Sebastián Orresta, quien se desgarró y tendrá para unas tres semanas afuera de las canchas. El base suma a las bajas de Andrés Landoni, Fernando Malara (reemplazado por Federico Marín) más las dos fichas extranjeras que todavía no han ocupado, tras las salidas de Aubrey Coleman y Wendell McKines. Con sólo 6 jugadores de la habitual rotación disponibles, Laginestra tendrá que improvisar y mucho este domingo.

Pero lo llamativo de la cuestión es que a pesar de este escenario negativo, Estudiantes vive un gran momento en los resultados: han ganado cuatro de sus últimos cinco partidos, incluyendo tres victorias consecutivas fuera de casa, ante Atenas, Instituto y La Unión.

Con el que sí contarán es con su nuevo foráneo, Nikola Jeftic. El pivote ha entrado bien al equipo y tras dos partidos, promedia un doble-doble: 10,5 puntos y 11,5 rebotes. Está claro que con las urgencias que tiene en cuanto al personal, los de Concordia no se pueden dar el lujo de darle su tiempo de adaptación y ya lo utilizan como una de las piezas claves del equipo, junto con Matías Nocedal (10,4) y Federico Marín (12,1).