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Nikola Jokic es una estrella diferente de la NBA. Ajeno a la exposición y al hecho de ser una de las imágenes de la mejor liga del mundo, el serbio charló con Michael Porter Jr. y habló sobre este tema y cómo vive el día a día.

“A mí no me gusta esta vida. Al final del día, solo somos jugadores de baloncesto, solo somos buenos en lo que hacemos, pero la prensa está alrededor y por supuesto nos pagan gracias a eso, gracias a la popularidad. A algunas personas les gusta ser famoso, a otras no” contó el pivote.

A la vez, agregó: “Cuando termine mi carrera realmente deseo que nadie me reconozca. Deseo que mi hijo o mis hijos en el futuro me recuerden como padre y no como jugador de baloncesto. Creo que ese será mi objetivo en la vida, al igual que el hecho de no tener teléfono. Será otro gran objetivo. Simplemente vivir el momento, ser una persona normal, ir a tomar algo, a comer, con los caballos. Ahora voy al bar, al restaurante, en todos lados la gente saca sus móviles para intentar grabarte. Para mí eso es desagradable”.

Sobre su forma de pensar y desarrollarse contó: “La clave es no relajarse. Si empiezas a pensar…Cuando llegué aquí era la quinta opción. Todos estaban por delante de mí. Hubo un momento que empezamos a jugar Nurkic y yo juntos, pero eso no funcionó. Y pedí que me mandaran al banquillo porque el equipo no estaba ganando. Unos meses después empecé a ser titular. Y todo fue hacia arriba”.

Por último, explicó que “cuando termine mi carrera, pienso que toda la publicidad se irá. Querré estar con la familia, pasando días con mi hijo o los que tenga, quien sabe, quizá hagan algo de deporte o algo interesante, y pasar el resto del día con mis caballos. Tengo algunos caballos fuera de Serbia, en Italia, Suecia e Italia. Quizá competir con ellos. Es uno de mis sueños ocultos. Recorrer el mundo o Europa y competir con ellos”.