Informe Especial

NBA y lesiones: conclusiones de una temporada atípica y complicada

19:02 25/08/2021 | La 2020/21 vio situaciones lamentables como pocas veces antes. Una investigación realizada en conjunto con el kinesiólogo Ezequiel Lamas.

Murray sufrió una lesión que lo marginó por el resto de la temporada (Foto: NBA)

Persecución en transición e intento de tapa frustrado. Caída libre en picada y un grito al cielo. Hasta un poco de sangre y un dolor indescriptible que provoca que Mo Bamba se saque la camiseta y cubra el tobillo de su compañero. Devin Cannady, el último MVP de la G-League, yacía en el suelo y no paraba de estremecerse ante una dura lesión que luego desembocó en una fractura expuesta.

Aquel escenario, lamentablemente, no terminó siendo una excepción, sino la regla. La temporada 2020/21 de la NBA estará para siempre marcada por la acción y las jugadas espectaculares, pero también por la sobrevivencia en vilo por un maligno virus y la cantidad de golpes que sufrieron los jugadores de la competencia partido a partido.

Los números no mienten y hubo 2.909 juegos perdidos por lesiones de tejido blando (incluyen esguinces, distensiones y contusiones) en la última temporada regular, según el entrenador atlético certificado Jeff Stotts, quien mantiene la base de datos pública de seguimiento de lesiones más autorizada que cubre la NBA.

Esa fue la segunda cifra más alta que Stotts registró desde que comenzó estos rastreos en la 2005/06. La mayor cantidad fue de 3,038 en la temporada 2017/18, con la diferencia de que en esa campaña se disputaron 82 encuentros no 72 como en la 2020/21.

Además de la temporada baja acortada, con menos tiempo para que los jugadores se preparen, ya que el 11 de octubre del 2020 finalizó la 2019/20 y el 22 de diciembre de ese año ya arrancó la nueva campaña, los equipos tuvieron un calendario condensado en la segunda mitad de la temporada debido a los juegos pospuestos por Covid.

Por ejemplo, los Memphis Grizzlies disputaron 40 partidos en 66 días, incluidos cuatro cotejos en cinco noches. Los equipos de toda la liga intentaron combatir la fatiga de los jugadores con este horario con menos prácticas y sesiones en la sala de pesas, pero al parecer no tuvieron éxito.

No solo eso. El segundo apartado es la construcción del calendario. La cantidad de partidos se redujo a diez menos, pero los juegos consecutivos invadieron la escena y, por ejemplo, de acuerdo con el sitio NBAstuffer, los encuentros con un día de descanso, que en la temporada 2018/19 fueron de 40,5 en promedio (siendo Miami y Toronto los que más oportunidades tuvieron de hacerlo con 45) una suma mucho más baja que la de la 2020/21, que tuvo una media de 15,7.

Solo Houston, Miami y Toronto estuvieron cerca de acercarse a esa cantidad de días de descanso de hace dos campañas, con 23 cada uno.

A su vez, el total de back to backs (dos partidos jugados en dos días sin descanso) de visitante no distó mucho si se comparan dos temporadas como la 2016/17, también de 82 partidos, y la actual, con la diferencia de que en la 2020/21 se disputarán diez encuentros menos en la regular. En la campaña que se mencionó primero existieron en promedio 10,8 y en la segunda 3,7.

Si bien está comprobado que la fatiga y la falta de descanso generan una descoordinación que puede llevar al aumento de lesiones traumáticas, eso es más intangible. Por ende, se buscó analizar las de tejido blando (como las de los isquiotibiales y la ingle que dejaron al margen a Anthony Davis y James Harden) porque son las que mejor pueden relacionarse con el primer punto explicado en este párrafo.

Pero, ¿qué pasa con los esguinces de tobillo, como los que sufrieron Kyrie Irving, Donovan Mitchell y Trae Young, o las de rodilla de Giannis Antetokounmpo y Kawhi Leonard? Claro, pisar el pie de otra persona o aterrizar torpemente puede suceder en cualquier momento, pero, más allá de algunos intangibles, se produjeron y detectaron un mayor número de lesiones traumáticas grandes en la última temporada.

Los jugadores aceptaron este fixture, principalmente para evitar perder millones de dólares de televisión al jugar menos encuentros, pero están viendo los resultados de una temporada para el olvido, en la que los números detallan el análisis frío y los videos de los golpes una tragedia que significó una crónica de muerte anunciada cuando todos dieron el sí al dinero.

 

 

Ezequiel Lamas/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @LamasEzequiel

 

Ignacio Miranda/ [email protected]
En Twitter: @basquetplus
En Twitter: @nachomiranda14

Etiquetado como:

Compartir