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Walker Kessler, el prometedor pivote de Utah Jazz, fue objeto de controversia en el reciente Mundial, donde Estados Unidos no logró medalla. A pesar de su impresionante temporada en la NBA y su capacidad defensiva, Kessler fue subutilizado por el entrenador Steve Kerr.

Kessler, quien llegó a Utah en un importante canje por Rudy Gobert, demostró ser una fuerza en la liga con estadísticas destacadas de 9.2 puntos, 8.4 rebotes, 0.9 asistencias y 2.3 bloqueos por partido en tan solo 23 minutos. Estas actuaciones le valieron un lugar en el Primer Equipo de Novatos de la NBA.

Sin embargo, en el Mundial Kessler tuvo un tiempo de juego limitado. Estuvo en cancha solo 28 minutos en todo el torneo. Incluso se quedó sin jugar en el partido semifinal contra Alemania, a pesar de la necesidad de presencia en la pintura frente a jugadores como Daniel Theis. Kerr optó por Jaren Jackson Jr. como el centro titular, a pesar de las capacidades defensivas probadas de Kessler.

De los 28 minutos que jugó, 16 de ellos fueron ante Canadá. La falta de minutos para Kessler y las decisiones de Kerr han sido objeto de críticas, ya que Estados Unidos no logró una medalla en un torneo donde se esperaba un rendimiento sólido. Esto plantea interrogantes sobre la idoneidad de Kerr para aprovechar al máximo a los jugadores interiores y podría hacer que Kessler reconsidere su participación en futuros equipos de Estados Unidos si Kerr sigue siendo el entrenador.

El potencial de Kessler como un defensor sólido en la pintura es indiscutible, y su limitado tiempo de juego en el Mundial es una de las grandes rarezas. Después de todo, la juventud de Kessler y su gran potencial dejan la puerta abierta para una revancha.