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Steve Kerr es un entrenador sin miedo a hacer cambios drásticos en el juego. Desde su revolución del tiro de tres puntos a la famosa “Alineación de la muerte” en Golden State, el exjugador de los Bulls nunca dudó en insistir con nuevas ideas para sacar una diferencia. En esta ocasión, según lo reportado por ESPN, Kerr se decidió a sacar a Chris Paul como titular en la próxima campaña.

"Creo que van a intentarlo", dijo recientemente Marc Spears de ESPN en el podcast "Good Word with Goodwill" de Yahoo. "No es una opinión que se espere que Paul comience los juegos con Steph y Klay. Es lo que estoy escuchando. Él nunca salió desde el banco en su carrera" expresó el insider.

Si Kerr decide hacer que Paul y Curry sean titulares juntos, podría ser un grave error al final. Desde ya, la verdad no está escrita, y quizás el entrenador ya encontró la forma de que un dúo de bases funcione, pero a simple vista parece contraproducente.

Si una superestrella como Curry estuvo dispuesto a salir desde el banquillo en varios juegos de playoffs, como lo hizo contra Denver Nuggets en 2022, Paul debería estar dispuesto a hacer lo mismo. Su historial no debería influir en las decisiones que tome Kerr, dado que ya no es el All-Star que supo ser unos años atrás.

Hacer que Paul y Curry compartan cancha no solo daría como resultado una pareja de bases pequeña para los Warriors, sino que también los haría mucho peores en defensa y tendría un efecto dominó perjudicial en el resto del equipo. Si bien la Alineación de la muerte consistía en un equipo más chico, la pareja perimetral no variaba, y tomando en cuenta cómo les fue con Jordan Poole, Steph y Klay juntos en 2022-23, no hay muchos puntos positivos a favor en esta ocasión.

En primer lugar, probablemente significaría que Draymond Green, que no llega a los dos metros, tenga la mayor cantidad de minutos como pivote y Kevon Looney salga desde el banco, un rol en el que no será igual de importante ya que su gran valor está en darle balance defensivo, así como en el tablero, a un equipo rápido y ofensivo.

La carga de jugar como pivote de manera regular sería dura para Green, que tiene 33 años y no es la misma fuerza defensiva del 2016. Debería conservar su energía para los playoffs en lugar de enfrentarse a jugadores que le saquen mucha diferencia. Nikola Jokic, Joel Embiid, Anthony Davis y compañía deberían tener la ventaja en los emparejamientos.

Además, Looney, el mejor reboteador del equipo, ha demostrado ser un activo increíblemente valioso. Promedió 13.1 rebotes en los playoffs la temporada pasada y debería seguir siendo titular. Si el pivote saliera del banco, no sólo estaría injustificado el nuevo contrato que le dieron, que no es muchísimo dinero pero le cuenta en contra a la franquicia en el Impuesto de Lujo. Además, perderían un dominio en el tablero gigante que los mantuvo vivos contra los Kings en la primera ronda.

Si bien Chris Paul tuvo un apogeo sensacional, lo que mostró muy claro la temporada pasada en Golden State es que necesitan un base de jerarquía que salga del banquillo, ya que con Jordan Poole y otros jugadores poco dotados para la ofensiva, no había un sentido de la organización. Además, con CP3 desde el banco, jugadores secundarios como Jonathan Kuminga o Moses Moody podrían crecer mucho alimentándose de su capacidad pasadora en esa segunda unidad.

La mejor alineación de la NBA en lo que a 5 jugadores se refiere, durante la temporada 2022-23, tuvo a Golden State en primer lugar con Stephen Curry, Klay Thompson, Andrew Wiggins, Draymond Green y Kevon Looney. Poner a Paul en ese quinteto podría ser un error devastador para la organización.