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Nicolás Gianella nunca pensó que a sus 43 años seguiría jugando. Sin embargo, el base oriundo de La Plata se prepara para iniciar su tercera campaña seguida en el club de su vida, Gimnasia y Esgrima La Plata.

“A los 34 o 35, cuando volví de Europa, pensé que ya estaba terminando mi carrera. Le dije a mi mujer que era lo último que iba a hacer, termino jugando en Argentina y ni hablar la edad que tengo, cada vez que me pongo a pensar es una locura. Pero si estoy acá es porque todavía disfruto, así que estoy agradecido por todo”comentó el ex Granada.

Entre las razones que lo llevan a seguir, Gianella comentó: “La pasión que tengo por este deporte, me da mucha vida, me siento muy querido y muy respetado en el club. Desde que pegué la vuelta, los dirigentes, entrenadores y, sobre todo los compañeros, he recibido un respeto. Me sentí muy querido y valorado, y en este momento de mi carrera es fundamental, muy valioso”. Además, agregó que “soy una persona muy orgullosa, competitiva y me gusta estar a la altura. Si no sintiera que estoy capacitado para estar no lo haría sin dudas. Soy muy exigente conmigo mismo, sin dudas que tengo que hacer muchos sacrificios extra, tengo que tener más descansos, tengo que hacer muchas cosas, pero si estoy acá es porque soy muy exigente”.

El base viene de jugar una Liga Argentina en plena pandemia y contó cómo la vivió: “Fue una temporada rarísima, sin público, una cosa particular, para los jugadores es distinto. Nos quedamos con sabor a poco, pasó la temporada y ni siquiera pudimos entrar a playoffs, que era la ilusión que teníamos. Más allá de que fue todo muy raro en todo aspecto, el equipo en un momento había mostrado un buen rendimiento para poder estar en playoffs. Lamentablemente no se dio, así que esperanzados este año de poder cumplir las metas que tenemos. Pudimos reforzar puestos que el año pasado teníamos falencias y muy ilusionados para la temporada que se viene”.

Por otra parte, el equipo de Gimnasia se renovó de cara a esta próxima campaña, con las llegadas de Tomás Ligorria, Franco Barroso y Facundo Vallejos, además de la pérdida de Pablo Alderete. Ante estos cambios, el platense dio su opinión del equipo: “Lo más importante es que se mantiene la base, que en cualquier equipo ya tenés mucho ganado, por mantener la idea de juego y lo que quiere el entrenador es fundamental. Después haber sumado gente grande en la pintura, que fue uno de los puntos más débiles que tuvimos el año pasado, hace que este año estemos muy confiados. Después no solo el material deportivo se valora, sino también la parte humana, y los chicos que vinieron se adaptaron muy bien, el grupo se conformó, el ambiente es muy bueno, se vive así día a día y eso nos da ilusión para la temporada que viene”.

El Lobo tiene la particularidad de tener en su plantel a más de la mitad del equipo salido de las inferiores del club, incluido Gianella, lo que es motivo de orgullo para el base: “Es un orgullo, no en todos lados se ve que los jugadores de inferiores lleguen a primera, se va formando un equipo con tantos jugadores de la cantera y eso es un orgullo para todos. Saber que en el club algo se está haciendo bien y disfrutarlo. Cuando tenés jugadores que son hinchas del club también tenés un plus a la hora del compromiso que se nota, así que por ese lado también me dan ganas de seguir comprometido y estando un año más, por el compromiso por parte de todos que hace que a uno le den ganas de sumarse”.

Trato de dar el máximo siempre y aportar mi experiencia en momentos difíciles, que todos los equipos los pasan. En esos momentos uno tiene que estar más para acompañar al grupo y salir adelante.

Alejandro Malky / [email protected]

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